inicia sesión o regístrate.
¡Buen día! "¿Y quién es Dios?"
¡Buen día! "¿Y quién es Dios?" Este librito de Miguel Ortega Riquelme fue citado algunas veces en este espacio. Y lo seguiremos citando porque nos ayuda a descubrir algo que forma parte esencial de nuestra vida, aun cuando lo neguemos: Dios. El es la Vida. Y es el autor de nuestra vida. "El Dios de la vida" se titula precisamente uno de sus capítulos. Dice:
"Vivimos. Cada uno lo siente en su interior. Nuestro corazón palpita 80 ó 100 veces por minuto. Nuestros pulmones respiran unas 22.000 veces por día. Nuestros músculos nos movilizan, nos levantan y nos mantienen de pie. Nuestros ojos descubren las formas, el paisaje, el color. Nuestros oídos escuchan la palabra, la música y el canto. Nuestra sexualidad nos define hombres o mujeres de un modo hermoso y atrayente.
Vivimos. Y esa sensación de vida la percibimos absolutamente gratuita. No fuimos nosotros los que elegimos vivir. Fue Dios quien nos llamó a la vida. La vida la recibimos como un don o un regalo y la merecemos haciendo de ella una ofrenda para otros. La vida en este mundo no nos pertenece ni desde sus inicios ni hasta su término.
Llevamos en nosotros mismos ese suave aliento de Dios en las narices de Adán. Desde ese día el hombre empezó su existencia y por generaciones se nos transmite hasta hoy. En el interior dar sus pasos, amar a otros, convivir, crecer y superar conflictos. Dicho simplemente: vivimos porque Dios vive en nosotros. Nada más.
Y este amor a la vida que tenemos es también (a veces sin saberlo) un amor al Dios que nos habita. Si Dios envió a su hijo a compartir en la tierra con nosotros es porque él quiere darnos vida de un modo abundante y pleno. El quiere restaurar la vida allí donde el hombre herido y doblegado. El quiere devolver la vida allí donde la muerte se ha creído triunfadora. El mayor empeño de Dios, su mayor logro y su mejor obra consiste precisamente en hacer surgir la vida allí donde nosotros sólo ponemos caos, destrucción y muerte...".
¡Y qué bueno vivir la vida bien! Honrándola, como regalo de Dios. "Honrar la vida", ¿recuerda la canción?
¡Hasta mañana!