inicia sesión o regístrate.
Los manifestantes se movilizaron en contra del proyecto de ordenanza que pretende erradicar la tracción a sangre, ya que de aprobarse 700 familias quedaran sin ninguna fuente de ingreso.
Después de momentos de incertidumbre el corte se levantó a las 12.30 cuando la concejal Frida Fonseca llegó al lugar donde se desarrollaba la protesta y se dispuso a dialogar con los carreros. "Cuando llegué les expliqué que lo que está en consideración es un proyecto de ordenanza que todavía no está aprobado. Después de hablar con ellos, hicieron una asamblea y decidieron levantar la medida. Acordamos que mañana (por hoy) nos vamos a reunir a las 10 de la mañana en el Concejo Deliberante con 10 delegados de los carreros y los concejales de otros bloques", dijo Frida Fonseca a El Tribuno.
La edil aclaró a los carreros que ellos también pueden plantear sus inquietudes ya que no es un proyecto cerrado. "En ningún caso hay intención de que se queden sin su fuente laboral, lo único que se quiere es que tengan más oportunidades laborales. Me plantearon su situación de pobreza y además la necesidad de conseguir terrenos para viviendas. Es por eso que yo voy a trasladar esa inquietud al Gobierno provincial, ya que vamos a necesitar su colaboración. La idea es ver qué alternativas hay, aunque ellos no tienen intensiones de abandonar el carro porque lo consideran un trabajo digno y no quieren ser perseguidos en su actividad", agregó Fonseca.
"Queremos trabajar"
Fredy Flores Núñez, referente de la Asociación Carreros Salteños, expuso que el corte realizado es porque las autoridades municipales los empujaron a esa situación. "Nos negamos a que nuestros hijos sean los nuevos mendigos de la plaza de 9 de Julio o los futuros delincuentes de la ciudad", expresó indignado el referente.
El inconveniente que existe es que los carreros ven que se les está impidiendo trabajar al tratar de impedir que circulen con caballos. "El único pedido a grito que hacemos es que nos dejen trabajar. Nosotros somos el eslabón más pobre de la ciudad de Salta. Acá ya no está en tela de juicio si el caballo está flaco o no, está en juego el futuro de nuestros hijos. Gracias al carro, nuestros pequeños están en un estado nutricional perfecto. Nosotros trabajamos para que nuestra familia esté unida y, mientras tanto, las autoridades hacen oídos sordos", comentó Flores.
La Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores (FACyR) quiere regularizar la actividad y trabajar en conjunto una solución de fondo a los problemas socioeconómicos de las centenares de familias que viven del trabajo en carro.