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En menor proporción de lo que sucede en días hábiles, el fin de semana fue la opción elegida por varios usuarios que aprovecharon la habilitación excepcional de las oficinas de Saeta para cumplir con el trámite.
Largas filas formaron parte del cuadro que encontraron quienes decidieron gestionar el pase en el Híper Libertad. Alrededor de sesenta personas aguardaron durante las primeras horas de ayer para ser atendidas.
"Calculamos que estaremos aquí más de una hora pero es algo que teníamos previsto, siempre sucede lo mismo", dijo a El Tribuno Ramiro Alberti, quien buscaba activar la tarjeta de su hijo.
Las que no reflejaron demoras fueron las oficinas de la calle Pellegrini 824. "Pensaba que nos demoraríamos más, pero ni bien entramos nos atendieron", aseguró Natalia, quien renovó el pase libre para sus pequeños hijos.
De acuerdo a lo informado por algunos empleados, la diferencia de afluencia se debió a la costumbre de concurrir al centro comercial de la zona sur, sin tener en cuenta que hay otros lugares para realizar la diligencia.
Las terminales de autogestión están disponibles durante las 24 horas, por lo que el fin de semana no tuvo mayor concurrencia.
La vigencia del boleto gratuito para los estudiantes primarios y secundarios comenzará a regir desde el martes. El beneficio será el último en ponerse en marcha por parte de Saeta ya que el 3 de febrero fue el turno para los estudiantes universitarios y el 15 para los terciarios.
El universo de pases libres oscila los 150 mil, pero aún resta conocer quiénes abandonaron los estudios y no gozarán del beneficio.
No finaliza la renovación
"No existe último día, pueden renovar siempre. El apuro de los padres se debe a que con el inicio de las clases se habilita el pase libre y no pueden hacer uso de él si no está renovado", informaron a El Tribuno desde Saeta.