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En Campo Durán, Refinor entró en crisis: retiros y paro

Miércoles, 23 de marzo de 2016 01:30
<div>Un grupo de trabajadores en la manifestación del lunes en la refinería.</div><div>
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Como ya se preveía en los últimos cuatro años, la destilería de Campo Durán operada por Refinor comenzó un plan de reducción de personal. Bajo la figura de retiros voluntarios, conocido sistema en el norte tras la privatización de YPF, los trabajadores fueron prácticamente conminados a aceptar este ofrecimiento, pero la respuesta del gremio de trabajadores del sector y los propios operarios no se hizo esperar.
Desde la hora 0 de ayer, la refinería donde se procesa el gas y el petróleo de los pozos del NOA y otros 8 millones de metros cúbicos de gas que ingresan del sur de Bolivia, dejó de operar. Esto significa que en el complejo solo está trabajando una planta de compresión de gas a cargo de la empresa Secco; el resto de las instalaciones salieron de servicio completamente.
Por su parte, un grupo de trabajadores autoconvocados de Aguaray y sus familias realizaron una marcha para repudiar la actitud de Refinor y resistir la medida.

Motivos del desenlace

Alberto Romero, secretario general del gremio de trabajadores de la industria del petróleo y el gas, explicó que "fueron varios los factores que llevaron a esta situación, pero que son de conocimiento público desde hace mucho tiempo. Por un lado, la puesta en funcionamiento de la planta de tratamiento de gas Gran Chaco de Yacuiba, que utiliza buena parte del gas de los pozos del sur boliviano y que ya comenzó a operar cada vez con mayores volúmenes. Otro de los motivos es un juicio que tiene la empresa Refinor con la Nación y que no fue solucionado por el Gobierno anterior y, finalmente, el precio del gas en boca de pozo que todavía no se definió por parte del Ministerio de Energía nacional. Todos estos inconvenientes derivaron en que, el año pasado, Refinor anticipara su intención de achicar la planta del personal como medida inicial", explicó el sindicalista.

Despidos encubiertos

Durante los meses de enero y febrero pasado, el gremio y Refinor estuvieron en permanentes conversaciones con la intermediación del Ministerio de Trabajo de la Nación que había dictado una conciliación obligatoria cuando la entidad gremial amenazó con un paro en Campo Durán. "En esas conversaciones y con el ánimo de que no se afecte ni una sola fuente de trabajo, le propusimos a la empresa que jubile al personal que está en condiciones y que ofrezca un retiro voluntario mejorado a los trabajadores que pudieran aceptarlo, ya sea porque tienen posibilidades de irse de la zona, por expectativas laborales en otro lugar o por cualquier otra razón. Pero Refinor no solo no jubiló al personal ni realizó ese ofrecimiento, sino que prácticamente está obligando a los trabajadores a que se acojan al retiro voluntario que ellos dispusieron. Ese fue el motivo por el que desde ayer la refinería está sin operar, lo que implica que ni el gas ni el petróleo están sometidos a los procesos de refinamiento", dijo el sindicalista.

Lo que viene

El gremio tiene previsto reunirse hoy en horas de la mañana en Buenos Aires con representantes de Refinor, cuyo paquete accionario está conformado por YPF y Petrobras, hoy también en gravísima crisis, entre otras multinacionales. La reunión está programada para las 11 en el Ministerio de Trabajo.
La posición gremial es clara, y lo pusieron de manifiesto en la noche del lunes cuando los trabajadores y sus familias realizaron una marcha por las calles de Aguaray exigiendo que no se tomen medidas de achicamiento de la planta de personal del complejo Refinor, donde prestan servicios alrededor de 300 operarios.


El planteo de Refinor

La operadora del complejo y poliducto Campo Durán pone el eje en que el Estado comenzó a cobrarle un cargo por su actividad desde 2010, por lo que en casi seis años se acumuló una deuda que ronda los $800 millones. El precio interno del gas, la baja en el consumo de combustibles, las dificultades que provoca el gas que ingresa de Bolivia y sus permanentes fluctuaciones en cuanto a volúmenes que diariamente recibe, son los argumentos de Refinor para reducir el personal.
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