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El abogado del juez de línea Martín Bustos fue detenido en las últimas horas sospechado de encubrir a su cliente tras romper el celular del árbitro con un martillo para, presuntamente, ocultar pruebas en el marco de la causa que investiga casos de abusos con jugadores juveniles del club Independiente.
El letrado, de quien se desconoce la identidad, fue apresado en la tarde del sábado por orden de la fiscal María Soledad Garibaldi, titular de la UFI 4 de Avellaneda, quien lleva a cabo la investigación acerca de si Bustos formaba parte de una red de prostitución.
Según se informó, el abogado rompió el teléfono celular de su defendido con un martillo lo cual se consideró una maniobra para obstruir la pesquisa mientras que en su vivienda los efectivos también encontraron un arma.
Bustos fue detenido en la mañana del sábado en su casa de Los Troncos del Talar, cuando policías bonaerenses llegaron hasta allí rastreando las celdas de su teléfono, el que luego rompió su abogado.
El teléfono celular era clave en la investigación de este caso, ya que en el chip, que también fue destruido, se guardan todos los datos de llamadas, mensajes de texto y redes sociales del usuario.
La hipótesis que manejan los pesquisas es que la red de prostitución captaba a los jugadores de las divisiones inferiores de Independiente a través de Instagram, para luego engañarlos y con el ofrecimiento de dinero, llevarlos a un lugar en donde eran explotados sexualmente.
La investigación se inició luego que uno de los jugadores que viven en la pensión del club le contó al jefe de departamento de psicólogos que él y otros chicos mantenían relaciones sexuales con mayores a cambio de plata.
Si bien los nombres de los menores involucrados no fueron dados a conocer por cuestiones legales, sí se pudo determinar que quien era el nexo entre el árbitro detenido y los chicos era un jugador de las divisiones de Independiente, de 19 años, quien ya fue expulsado de la entidad de Avellaneda.