El partido que ayer Colón y Vélez Sarsfield empataban sin goles en Santa Fe por la Superliga fue suspendido “por falta de garantías” a los 22 minutos del primer tiempo por el árbitro Andrés Merlos, luego de que cayeran repetidamente bombas de estruendo sobre el arco defendido por César Rigamonti, del conjunto visitante.
El partido se jugaba en el estadio Brigadier Estanislao López y a los 5 minutos cayó la primera bomba cerca de Rigamonti, la segunda fue a los 15 minutos y aturdió al arquero y la tercera, a los 22 minutos, provocó la suspensión del juego.
Las bombas fueron lanzadas desde la cabecera donde su ubicaba la “barra” de Colón.
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El partido que ayer Colón y Vélez Sarsfield empataban sin goles en Santa Fe por la Superliga fue suspendido “por falta de garantías” a los 22 minutos del primer tiempo por el árbitro Andrés Merlos, luego de que cayeran repetidamente bombas de estruendo sobre el arco defendido por César Rigamonti, del conjunto visitante.
El partido se jugaba en el estadio Brigadier Estanislao López y a los 5 minutos cayó la primera bomba cerca de Rigamonti, la segunda fue a los 15 minutos y aturdió al arquero y la tercera, a los 22 minutos, provocó la suspensión del juego.
Las bombas fueron lanzadas desde la cabecera donde su ubicaba la “barra” de Colón.
Hasta ahí Vélez había insinuado algo más, con remates desde afuera del área de Matías Vargas y de Nicolás Domínguez desviados, y Colón había respondido con un envío de Javier Correa, que se fue sobre el travesaño.
En la semana, la Superliga elevará el informe arbitral al Tribunal de Disciplina de la AFA para determinar sanciones, informó la oficina de prensa del certamen.
Por su parte, Ee árbitro Andrés Merlos aseguró ayer que tomó la decisión de suspender el partido entre Colón de Santa Fe y Vélez Sarsfield, a los 22 minutos del primer tiempo (0 a 0) y luego de la caída de tres bombas de estruendo, porque “el jefe del operativo de seguridad” le advirtió que “no podía dar las garantías para seguir”.
“El jefe del operativo me dijo que no podía dar las garantías para seguir. Cuando se ponen en juego la vida de las personas es un límite que no se puede pasar”, dijo Merlos al canal TNT Sports.
“Habíamos hecho una advertencia luego de la primera bomba de estruendo y siguieron, así que de común acuerdo con los responsables del operativo decidimos suspenderlo”, añadió.
Merlos adelantó que elevará “el informe al Tribunal de Disciplina” y que allí se tomará una definición sobre el partido. “No sé qué resolverán. Yo me limito a explicar lo sucedido”, dijo.
“No podíamos poner en riesgo la integridad física de los jugadores ni de mis compañeros. Hicimos todo lo posible, agotamos todas las instancias y hasta el arquero de Vélez (César Rigamonti) puso toda su buena voluntad para seguir. Pero no se pudo”, agregó.
El árbitro, finalmente, expresó: “Nos vamos con una mezcla de tristeza y de bronca porque el fútbol debe ser un espectáculo para disfrutar y no esto que sucedió”.