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Tres narcotraficantes que partieron ayer desde la ciudad de Orán, en Salta, fueron detenidos sobre ruta nacional 16 después de atravesar la provincia de norte a sur, y luego de que ingresaran a la ruta por un camino alternativo para poder burlar algunos controles en nuestra provincia.
Sin embargo, cuando los mismos se hallaban en la localidad de Monte Quemado, Santiago del Estero, fueron interceptados en un control de ruta. Las tres personas fueron detenidas y se les secuestró 30 kilos de cocaína.
A través de un control llevado a cabo por Gendarmería Nacional se logró detener la marcha del vehículo en el que circulaban las tres personas en actitud sospechosa, que ya venían siendo investigadas durante su travesía por diversas rutas de nuestra provincia.
Había datos precisos de que los narcotraficantes pretendían llegar a la provincia de Chaco. Sin embargo, efectivos nacionales los descubrieron sobre ruta nacional 16. Tras la detección del auto, los gendarmes comenzaron la requisa y descubrieron que en el torpedo del vehículo había improntas de que había sido removido y luego sellado. En ese lugar los narcotraficantes escondían 30 kilos de cocaína.
Los tres ocupantes del vehículo fueron inmediatamente detenidos. Eran dos hombres y la mujer oriundos de Orán, Salta, que se dirigían a Chaco, al menos así lo expresaron cuando fueron interceptados para el control de ruta.
La zona más caliente
Fuentes de seguridad informaron a El Tribuno que la zona comprendida por las tres provincias que tienen límites dentro de la llamada región chaqueña sur es un lugar donde el tráfico de cocaína y marihuana se intensificó de manera exponencial y deslizaron que en poco más de un mes las diversas fuerzas de seguridad secuestraron más de una tonelada de cocaína en tres grandes procedimientos, uno de ellos realizado hace unos días sobre ruta 29, casi en el límite con la provincia de Santiago del Estero, donde se secuestraron más de 400 kilos de cocaína que "llovieron" sobre una finca de El Quebrachal y estaba siendo transportada en un camión cisterna.
Por ese hecho hubo cinco detenidos y una investigación en marcha por una posible "lluvia de cocaína" de la que solo se hallaron las sacos o bolsas vacíos que cargan hasta 40 ladrillos de cocaína y que se usan para que la misma no se desparramen o rompan cuando tocan tierra en los montes de las fincas que se utilizan para la descarga de los narcovuelos. Los vecinos de aquellas soledades tienen historias interminables sobre el tráfico de drogas.