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Lo que comenzó como una salida de amigos terminó con una muerte sospechosa, un robo y la fuga de tres mujeres. La víctima fue Williams Jonathan Quispe Quenta, un joven boliviano de 19 años, quien murió luego de haber compartido tragos con sus amigos y tres desconocidas, tras una noche de boliche en el barrio porteño de Liniers.
Según el parte policial, al que accedió Noticias Argentinas, Quispe Quenta había ido a bailar el sábado por la noche al local bailable Equinoxio, junto a Rodrigo Laura y Efraín Torres Onofre. Allí conocieron a tres mujeres con quienes decidieron seguir la velada en una casa ubicada en la localidad bonaerense de Ciudadela, en la calle Muñoz al 1600.
El momento del ataque
Cerca de las seis de la mañana, el grupo llegó al domicilio. Según declararon los sobrevivientes, compartieron tragos con las mujeres y poco después perdieron el conocimiento. Al despertar, encontraron a Quispe Quenta sin signos vitales, recostado en una cama, con restos de vómito a su alrededor. Inmediatamente, constataron también que las mujeres habían desaparecido, llevándose consigo los celulares de los tres jóvenes y un televisor. Alarmados, llamaron al 911.
Personal de la Policía Bonaerense y del SAME llegaron al lugar y confirmaron que el joven ya había fallecido. El cuerpo fue trasladado a la morgue judicial por orden de la fiscal Silvana Giordano, de la UFI N°1 de San Martín, quien quedó a cargo de la investigación.
Homicidio sin violencia visible
En la escena del hecho trabajó personal de la DDI de San Martín, junto a la Policía Científica, que realizó pericias en la vivienda. En principio, no se detectaron signos visibles de violencia ni forzamiento.
Sin embargo, los investigadores no descartan que se haya tratado de una intoxicación con drogas, modalidad habitual en ataques de viudas negras, como se conoce a las mujeres que dopan a sus víctimas para robarles.
Por la gravedad del caso y la muerte de uno de los jóvenes, la causa fue caratulada como "homicidio criminis causa", es decir, un asesinato cometido para ocultar otro delito, en este caso, el robo.
Una modalidad en crecimiento
En los últimos años, los robos mediante seducción, drogas y escape protagonizados por bandas de mujeres, conocidas como viudas negras, se han vuelto cada vez más frecuentes en el AMBA, especialmente en salidas nocturnas.
Este nuevo episodio, con resultado fatal, volvió a poner en alerta a las autoridades. La fiscalía ya solicitó imágenes de cámaras de seguridad de la zona, para intentar identificar a las sospechosas que aún permanecen prófugas.
Los amigos de la víctima fueron citados nuevamente a declarar y se espera que el resultado de la autopsia determine si hubo presencia de alguna sustancia como benzodiacepinas o psicotrópicos, utilizadas habitualmente en este tipo de delitos.