inicia sesión o regístrate.
En medio de la creciente preocupación por el desastre ambiental generado en el pozo petrolero LOx-10, ubicado en Lomas de Olmedo, en el corazón del Chaco salteño, el ministro de Producción y Desarrollo Sustentable de Salta, Martín de los Ríos, informó que se reunió con autoridades de YPF para buscar colaboración en la contención de la emergencia.
"En el marco de las reuniones con distintas petroleras para buscar asistencia por el pozo X-10 de Lomas de Olmedo, nos reunimos con Horacio Marín, presidente de YPF S.A.", escribió De los Ríos en su cuenta oficial de X (antes Twitter), sin brindar mayores detalles sobre los resultados del encuentro.
El contacto con la petrolera estatal se produce luego de que El Tribuno expusiera una situación crítica en la zona del pozo: según testimonios y registros ambientales, se habría producido un masivo venteo de gases pesados y tóxicos, que generó una densa nube venenosa en el monte. La sustancia liberada habría afectado a la vegetación, fauna y comunidades cercanas, mientras organizaciones ambientalistas reclaman explicaciones y medidas urgentes.
El pozo LOx-10, que permanece fuera de control desde hace más de dos semanas, fue operado por una empresa concesionaria del área, y según fuentes técnicas, el incidente involucra fluidos del subsuelo con alto contenido de gas sulfhídrico, altamente nocivo para la salud.
Hasta el momento, no se ha emitido un informe oficial sobre los daños ambientales ni sobre el plan de remediación. El silencio de la empresa operadora, sumado a la escasa presencia de autoridades nacionales, mantiene en vilo a pobladores y referentes socioambientales del norte salteño.
Desde el Ministerio de Producción señalaron que la búsqueda de ayuda con petroleras como YPF forma parte de una estrategia para "sumar capacidades técnicas y logísticas" ante la complejidad del incidente. Sin embargo, voces críticas advierten sobre la falta de control previo y el rol del Estado en la fiscalización de estas actividades extractivas.