Alrededor de 50 feriantes fueron desalojados del predio donde trabajaban, por dos motivos: el terreno se encuentra inhabilitado y los vendedores no cuentan con recibos de compra de la mercadería, según lo indicó personal de la Dirección General de Rentas (DGR).
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Alrededor de 50 feriantes fueron desalojados del predio donde trabajaban, por dos motivos: el terreno se encuentra inhabilitado y los vendedores no cuentan con recibos de compra de la mercadería, según lo indicó personal de la Dirección General de Rentas (DGR).
A las 9, la división de Infantería de la Policía de Salta, junto con inspectores de Rentas y miembros de la Subsecretaría de Control Comercial de la Municipalidad de Salta, arribaron al lugar y pidieron a los feriantes que desalojen el espacio.
Durante la discusión entre feriantes y funcionarios uno de los vendedores amenazó con incendiar su carpa tirandole combustible. Fue persuadido por el personal presente y desistió.
Los feriantes aceptaron abandonar el predio, aunque le dijeron a El Tribuno que en ningún lado los dejan trabajar y que no saben qué es lo que van a hacer para poder sobrevivir.
La DGR decidió no decomisar la ropa con la condición de que el terreno quedara liberado cuanto antes.
A las 11 arribaron los fletes y los feriantes comenzaron a trasladar la ropa sin saber a donde irían.