Elena Veliz es una artista que se define a sí misma como alguien que busca ser auténtica y encontrarse profundamente en lo que hace. En su camino personal como pintora se sumerge cada vez más y lo que empezó como hobbie hace unos cinco años aproximadamente hoy se convirtió en una actividad que sostiene su vida.
"El arte es el medio por el cual vivo mi experiencia de una forma más rica. Me gustan los colores intensos y en mi trabajo me encuentro con la ternura que me sensibiliza. Soy madre de dos niñas pequeñas que son un motor para mí, le dan mucho sentido a mi vida. Comparto con ellas lo que hago. Trabajo en casa y ellas crean a mi lado, están ahí explorando, trabajar juntas es una retroalimentación", contó.
Elena no solamente vive su maternidad desde la experiencia directa, sino también desde su alma de artista, y desde esa sensibilidad y ternura que el arte despierta en ella. Muchos de sus cuadros hablan de algo que considera una vivencia única y superadora. Acerca de la maternidad como disparador de procesos creativos, Elena contó a El Tribuno: "Cuando comencé a retratar la maternidad, yo ya tenía dos hijas. Me sentí impulsada por mi pareja y por mis hijas. Siento un compromiso con la siguiente generación. Lo que podemos dejar a nuestros hijos es el sentido de superación, animarnos a ser, no quedarnos con el miedo, con la idea de cómo habría sido... Ellos incorporan esas herramientas y vivencias, después las usarán a su modo, pero habrán experimentado junto a uno y eso es positivo, está bueno tomar conciencia de que trasmitimos una manera de hacer las cosas".
El amor
Para esta artista la maternidad tiene que ver básicamente con el amor.
"Las personas buscamos entender lo que el amor significa y la maternidad está ligada al amor, que tiene que ver con este aguante que nos tenemos para darnos la oportunidad de crecer, desarrollarnos, sentir el brillo de la vida. Crecemos cuando estamos juntos, cuando nos dejamos convivir, nos reconocemos entre otros, gracias a la paciencia, los límites y la tolerancia. La familia es el humus para el crecimiento personal, crecemos todos, ser madre es aprender a amar y ser amado", señala.
Creativa
Hace alrededor de 5 años que Elena se dedica exclusivamente a la pintura.
"El dibujo fue un modo de salir de un espacio desvinculado de mi creatividad para comenzar a darme cuenta de que podía hacer algo propio, más representativo de mí misma y ser independiente", dice.
"Descubrí que tenía algo para compartir. Caí en una crisis personal fuerte y me 'tiré a la pileta' sin mucha idea de cómo lograrlo. Sin cursos ni preparativos previos, comencé a nadar y pude hacerlo. Ahora tomo clases con una maestra de arte y sigo preparándome para que esto tenga su proceso de desarrollo. Pero, sobre todo, empecé a tomar confianza y a creer en lo que me sucedía", cuenta.
Trabajos bien recibidos por la gente
Pinceles, pinturas y collages, en conexión con lo femenino y la gestación.
™Acerca de sus trabajos sobre la maternidad, esta artista salteña cuenta que son recibidos por la gente de muy buena manera. "Hay una necesidad de sentir representada la maternidad y algunos de los cuadros que más salida tienen son los que se relacionan con el embarazo o la maternidad misma", destaca.
En su obra sobresalen cuadros como "Luna embarazada", donde se relaciona la influencia lunar en lo femenino y la conexión con los ciclos y el latido. "Quise expresar el sentirse amparada por la luz de la luna", dice la salteña.
En "M'hijito", Elena empleó un collage de tonos plenos para "hablar de la experiencia maternal, la ingenuidad, la simpleza. También la madre joven, la mujer que se ilumina de ternura". En "Pacha Mama" representó la tierra que nos protege, nos alberga y alimenta, "como madre infinita y abundante". Por su parte, "Bajando al pueblo" es una acuarela en la que la mujer va por el sendero a encontrarse con la gente del pueblo. "La madre lleva a su hijo al hombro, protegido, y va a hacer lo necesario. Él esta viviendo esa misma experiencia, solo que filtrado por las emociones de la madre", dice Elena. Sus obras "Cosmos" y "Espera soleada" son meditaciones sobre el estado de gestación. "Los orígenes, el sentido, la aceptación de ser canal de tránsito, para la luz de la vida. Mi obra referida al embarazo y la maternidad es la conexión con este estado que nos lleva a sentirnos parte de la magia de la vida", afirmó.
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Elena Veliz es una artista que se define a sí misma como alguien que busca ser auténtica y encontrarse profundamente en lo que hace. En su camino personal como pintora se sumerge cada vez más y lo que empezó como hobbie hace unos cinco años aproximadamente hoy se convirtió en una actividad que sostiene su vida.
"El arte es el medio por el cual vivo mi experiencia de una forma más rica. Me gustan los colores intensos y en mi trabajo me encuentro con la ternura que me sensibiliza. Soy madre de dos niñas pequeñas que son un motor para mí, le dan mucho sentido a mi vida. Comparto con ellas lo que hago. Trabajo en casa y ellas crean a mi lado, están ahí explorando, trabajar juntas es una retroalimentación", contó.
Elena no solamente vive su maternidad desde la experiencia directa, sino también desde su alma de artista, y desde esa sensibilidad y ternura que el arte despierta en ella. Muchos de sus cuadros hablan de algo que considera una vivencia única y superadora. Acerca de la maternidad como disparador de procesos creativos, Elena contó a El Tribuno: "Cuando comencé a retratar la maternidad, yo ya tenía dos hijas. Me sentí impulsada por mi pareja y por mis hijas. Siento un compromiso con la siguiente generación. Lo que podemos dejar a nuestros hijos es el sentido de superación, animarnos a ser, no quedarnos con el miedo, con la idea de cómo habría sido... Ellos incorporan esas herramientas y vivencias, después las usarán a su modo, pero habrán experimentado junto a uno y eso es positivo, está bueno tomar conciencia de que trasmitimos una manera de hacer las cosas".
El amor
Para esta artista la maternidad tiene que ver básicamente con el amor.
"Las personas buscamos entender lo que el amor significa y la maternidad está ligada al amor, que tiene que ver con este aguante que nos tenemos para darnos la oportunidad de crecer, desarrollarnos, sentir el brillo de la vida. Crecemos cuando estamos juntos, cuando nos dejamos convivir, nos reconocemos entre otros, gracias a la paciencia, los límites y la tolerancia. La familia es el humus para el crecimiento personal, crecemos todos, ser madre es aprender a amar y ser amado", señala.
Creativa
Hace alrededor de 5 años que Elena se dedica exclusivamente a la pintura.
"El dibujo fue un modo de salir de un espacio desvinculado de mi creatividad para comenzar a darme cuenta de que podía hacer algo propio, más representativo de mí misma y ser independiente", dice.
"Descubrí que tenía algo para compartir. Caí en una crisis personal fuerte y me 'tiré a la pileta' sin mucha idea de cómo lograrlo. Sin cursos ni preparativos previos, comencé a nadar y pude hacerlo. Ahora tomo clases con una maestra de arte y sigo preparándome para que esto tenga su proceso de desarrollo. Pero, sobre todo, empecé a tomar confianza y a creer en lo que me sucedía", cuenta.
Trabajos bien recibidos por la gente
Pinceles, pinturas y collages, en conexión con lo femenino y la gestación.
™Acerca de sus trabajos sobre la maternidad, esta artista salteña cuenta que son recibidos por la gente de muy buena manera. "Hay una necesidad de sentir representada la maternidad y algunos de los cuadros que más salida tienen son los que se relacionan con el embarazo o la maternidad misma", destaca.
En su obra sobresalen cuadros como "Luna embarazada", donde se relaciona la influencia lunar en lo femenino y la conexión con los ciclos y el latido. "Quise expresar el sentirse amparada por la luz de la luna", dice la salteña.
En "M'hijito", Elena empleó un collage de tonos plenos para "hablar de la experiencia maternal, la ingenuidad, la simpleza. También la madre joven, la mujer que se ilumina de ternura". En "Pacha Mama" representó la tierra que nos protege, nos alberga y alimenta, "como madre infinita y abundante". Por su parte, "Bajando al pueblo" es una acuarela en la que la mujer va por el sendero a encontrarse con la gente del pueblo. "La madre lleva a su hijo al hombro, protegido, y va a hacer lo necesario. Él esta viviendo esa misma experiencia, solo que filtrado por las emociones de la madre", dice Elena. Sus obras "Cosmos" y "Espera soleada" son meditaciones sobre el estado de gestación. "Los orígenes, el sentido, la aceptación de ser canal de tránsito, para la luz de la vida. Mi obra referida al embarazo y la maternidad es la conexión con este estado que nos lleva a sentirnos parte de la magia de la vida", afirmó.