Desde barrio Las Colinas y 17 de Octubre, varios vecinos hicieron llegar sus pedidos de auxilio para el funcionamiento de los merenderos que hay en sus barrios. El reclamo común era que estos espacios que funcionaban en la zona dejaron de recibir asistencia de la Cooperadora Asistencial de la Capital.
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Desde barrio Las Colinas y 17 de Octubre, varios vecinos hicieron llegar sus pedidos de auxilio para el funcionamiento de los merenderos que hay en sus barrios. El reclamo común era que estos espacios que funcionaban en la zona dejaron de recibir asistencia de la Cooperadora Asistencial de la Capital.
En busca de una respuesta a esta situación, El Tribuno tomó contacto con la vicepresidenta de la Cooperadora Asistencial y subsecretaria de la Descentralización de la Ciudad de Salta, Cristina Gómez. Al respecto, destacó que los merenderos oficiales relevados debían presentar la documentación necesaria, a los fines de que la Cooperativa los visite y compruebe que mantienen su asistencia durante enero y febrero.
"En algunos casos puntuales se mantiene la asistencia porque se comprobó que los niños siguen yendo y que requieren del aporte nutricional que se les brinda", destacó Gómez.
La funcionaria agregó que durante el receso de clases, la copa de leche se destina a las colonias de vacaciones que se brindan en los balnearios Carlos Xamena, Juan Domingo Perón y Nicolás Vitale. También se suman las colonias de vacaciones que funcionan en los CIC de Solidaridad, Limache, Unión, Asunción y Constitución. Allí reciben los lunes, miércoles y viernes yogurt con galletas; y los martes y jueves leche chocolatada con pan de salvado.
Entre merenderos y colonias se entregan 4.800 raciones diarias.
El retorno de la copa de leche a la mayoría de los merenderos será a partir de marzo próximo, pero antes deberán registrarse. "A mediados de febrero, los miembros de la Cooperadora realizan una visita a los merenderos que solicitaron asistencia, se realiza un registro del promedio de niños de asisten y se comienza con la colaboración en marzo", explicó.
Gómez, además, destacó que se relevaron casos donde los merenderos están formados por tres o cuatro madres que se reúnen para asistir a sus propios hijos y no a los del barrio.
"Estos movimientos sociales deben ser estudiados con detalle, a los fines de que la asistencia del Estado se dirija a quiénes realmente lo necesitan. No hay que olvidar que muchas de estas personas reciben la asignación universal por hijo -que debe destinarse a los niños- y además están inscriptas en programas como Pan Casero y otros, en los que se les facilita otras ayudas", detalló la funcionaria.
Comedores abiertos
En otra parte de la charla con este medio, también afirmó que si bien los merenderos en su mayoría no mantienen la asistencia durante el período de clases, no ocurre lo mismo con los comedores infantiles. En estos espacios se sigue ofreciendo el almuerzo a los niños hasta los 12 años, aunque en la mayoría de los casos asisten acompañados por sus madres y abuelos.
La Cooperadora Asistencial brinda apoyo a 25 comedores registrados que se ubican en los barrios Floresta, Las Colinas y El Milagro. Gómez destacó que la mayoría de los comedores registrados se encuentran en la zona este de la ciudad de Salta. Allí se asiste a 2.500 chicos, a los que se suman padres y abuelos que también reciben la comida.
La funcionaria municipal destacó que aquellas personas que requieran de la asistencia de la Cooperadora para trabajar con merenderos y comedores deberán acercarse a las oficinas de Buenos Aires 613, de lunes a viernes, de 9 a 12, para solicitar las planillas de inscripción, en las que se detallan los requisitos.
"Una vez que el representante del comedor o merendero presente los requisitos, desde la Cooperadora se realizan varias visitas para comprobar la existencia de estos espacios y la modalidad de trabajo. Estas visitas se realizarán a partir del 15 de febrero", agregó Gómez.
Una vez realizados los relevamientos, aquellos espacios que cuentan con las condiciones necesarias para ofrecer esta asistencia social recibirán los aportes de la Cooperadora y el plan Copa de Leche desde la primera semana de marzo.
Otras de las funciones que se llevan adelante en estos espacios, es también la detección de familias con otras necesidades, a los que la Cooperadora ayuda con la entrega de mantas y colchones.