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Una víctima del cura Parma incriminó a otros cómplices

Dos reconocidos psicólogos y un sacerdote se suman a la lista de personas que conocían los abusos sexuales que sufrió por parte del religioso detenido en la provincia de Santa Cruz.
Viernes, 19 de octubre de 2018 02:35

El sacerdote Nicolás Parma fue detenido la semana pasada en Tucumán, acusado de abuso sexual contra dos aspirantes a novicios del instituto religioso "Hermanos Discípulos de Jesús de San Juan Bautista", fundado por el cura Agustín Rosa Torino. En una causa paralela, los mismos jóvenes acusaron por el mismo delito a este sacerdote, quien está procesado a la espera de que sea sometido a juicio oral.

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El sacerdote Nicolás Parma fue detenido la semana pasada en Tucumán, acusado de abuso sexual contra dos aspirantes a novicios del instituto religioso "Hermanos Discípulos de Jesús de San Juan Bautista", fundado por el cura Agustín Rosa Torino. En una causa paralela, los mismos jóvenes acusaron por el mismo delito a este sacerdote, quien está procesado a la espera de que sea sometido a juicio oral.

Uno de los denunciantes, que es parte del proceso judicial pero bajo identidad reservada, apuntó, además, contra otro sacerdote y dos reconocidos psicólogos locales.

La historia del joven devela una red de encubrimientos que atraviesa los muros eclesiásticos. Luego de haber sufrido cuatro años de abuso en la provincia de Santa Cruz, adonde Rosa Torino lo envió para que quedara bajo la "protección" de Parma. Luego fue traído a Salta y cuando llegó a esta ciudad insistió ante Rosa Torino para que le permitieran volver a su casa, en Pergamino, provincia de Buenos Aires. Contó que cada vez que le pedía autorización a sus superiores para irse le decían que estaban loco.

"A mí y a todos los que nos queríamos ir nos mandaban al psicólogo", dijo a El Tribuno. Citó a dos profesionales, madre e hijo, a los que identificó con las iniciales MS y EN. Apuntó que a pesar de haberle contado sobre los abusos, los psicólogos le recomendaban quedarse en la congregación. "Luego, con el tiempo, me di cuenta que estos profesionales estaban arreglados con la comunidad religiosa", subrayó.

Los hechos que relata el exnovicio forman parte de su declaración en la Justicia. A juicio del denunciante "la complicidad estaba en todas partes", e involucró a otro sacerdote, al que citó en su denuncia como uno de los que habría encubierto los abusos. "La Iglesia hizo la vista gorda, uno de los chicos que vivió en la casa, contó que le había dicho al padre Josué Salas que ocurrían cosas extrañas, que muchos chicos entraban a la habitación del padre Parma", describió. Enterado de esto, quien fue mano derecha del cura Rosa en la congregación no denunció los hechos, pero si tomó medidas domésticas. "El padre Josué mandó que dos duerman en la habitación de Parma. Ese año fue muy tranquilo porque el padre estaba vigilado, pero eso no duró mucho", recordó.

Los abusos del aún sacerdote Parma se habrían mantenido durante los cuatro años en los que el joven estuvo en el sur. Rutinariamente, ante cada episodio de abuso repetía sus actitudes. "Me decía que por culpa mía él hacia lo que hacía, que por culpa mía nosotros pecábamos, me decía que intente alejarme de él porque lo lastimaba. Y siempre me echó la culpa de todo lo que yo no entendía. Después de estos sucesos él se quedaba por horas en su pieza sin recibir a nadie y me pedía que mienta a los que llegaban a verlo", recordó.

La llegada de un nuevo grupo de aspirantes fue una oportunidad para incluir a más adolescentes en sus "juegos".

"Una noche nos pidió a mí y a otro chico que nos quedemos con él un rato. Nos mostraba aplicaciones en su celular de alta gama y nos prestaba su tablet para que juguemos a los jueguitos. Luego se puso de pie en medio de nosotros. Estaba en bóxer, nos quitó los objetos que teníamos y quedamos totalmente a oscuras. Se sentó en medio de nosotros y nos dijo lo mucho que nos quería y todo lo que nosotros significábamos para él, nos abrazó y empezó a tocarnos", relató. Contó que al otro día, ante la mirada avergonzada de ellos, Parma volvió a pedir disculpas.

 

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