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Merendero de San Calixto pide colaboración

Asiste a 90 niños de lunes a viernes. Cocinan a leña por falta de recursos.
Jueves, 31 de mayo de 2018 00:00

Desde febrero de 2016, los vecinos de lo que era ampliación parque La Vega -y que desde algunos meses se llama San Calixto- padecieron un centenar de situaciones y necesidades. En la búsqueda de posibles soluciones para las problemáticas diarias fueron surgiendo acciones y emprendimientos. Una de estas opciones fue la creación del merendero "Una sonrisa para los niños", que lleva adelante Norma Alarcón junto a otras dos mamás de la zona. En marzo de 2016, el merendero abrió sus puertas y desde entonces se fueron sumando los invitados. En su mayoría son los pequeños del barrio y algunas mamás embarazadas que también se acercan para tomar la merienda que se sirve de 16 a 19.30. "Ahora a las 19 se hace de noche así que a esa hora ya vienen pocos chicos. Igual algunos salen del colegio y pasan lo mismo a buscar en una jarrita su merienda y la llevan a la casa", contó Norma a El Tribuno.

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Desde febrero de 2016, los vecinos de lo que era ampliación parque La Vega -y que desde algunos meses se llama San Calixto- padecieron un centenar de situaciones y necesidades. En la búsqueda de posibles soluciones para las problemáticas diarias fueron surgiendo acciones y emprendimientos. Una de estas opciones fue la creación del merendero "Una sonrisa para los niños", que lleva adelante Norma Alarcón junto a otras dos mamás de la zona. En marzo de 2016, el merendero abrió sus puertas y desde entonces se fueron sumando los invitados. En su mayoría son los pequeños del barrio y algunas mamás embarazadas que también se acercan para tomar la merienda que se sirve de 16 a 19.30. "Ahora a las 19 se hace de noche así que a esa hora ya vienen pocos chicos. Igual algunos salen del colegio y pasan lo mismo a buscar en una jarrita su merienda y la llevan a la casa", contó Norma a El Tribuno.

De lunes a viernes, las encargadas del merendero buscan ofrecer recetas diferentes que sustenten a los pequeños y que además cubran mínimamente sus necesidades nutricionales.

Es por eso que el lunes se sirve arroz con leche, los martes se ofrece anchi, los miércoles es el turno de la mazamorra, los jueves pueden ser con leche planchada o chocolate y los viernes se cierran con mate cocido.

Durante los últimos meses también se están llevando a cabo actividades culturales y sociales con el apoyo de personal de la comisaría de barrio San Remo, que lleva el control de los presentes, mientras que los miércoles el merendero recibe la visita de un grupo de empleadas de un supermercado de la zona centro que llega con regalos y actividades escolares para los chicos. "A veces se suma algún payaso o mago. El martes vino un mago a darles un show mientras tomaban la merienda", destacó la mujer.

Norma contó que tanto el año pasado como este, desde el merendero se presentó el papeleo correspondiente a las autoridades de la Provincia y también del municipio para tener ayuda, pero hasta el momento no hubo respuestas. La mujer destacó que incluso en enero recibió un llamado desde el municipio para que actualice su carpeta, lo hizo y sigue sin recibir ningún aporte.

Actualmente, el barrio cuenta con un salón de usos múltiples pero el merendero funciona en el terreno donde viven Norma y una de sus 9 hijas con un nieto de 2. En el fondo se levantó un baño precario y un espacio donde se cocina. Desde allí se elabora la merienda, con leña. "Las vecinas me traen tarimas y con eso cocino todos los días. No tengo cocina a gas para poder hacer la merienda, así que nos damos maña", expresó la mujer.

A parte de las donaciones de los ingredientes necesarios para la merienda, también reciben la donación de pan desde la capilla ubicada en barrio El Círculo y también la entrega de ropa. Una vez a la semana, Norma arma un tablón con la ropa para que las mamás de la zona busquen la prenda que les sirva para sus hijos.

Además de atender el merendero, Norma también ayuda en una casa de comidas armando empanadas y, cuanto la convocan, cuida a personas mayores. "Cuando tengo un trabajo, las otras dos mamás se hacen cargo del merendero, así los chicos reciben su comida todos los días", expresó. "Una sonrisa para los niños" funciona en la manzana 16 casa 21. En el frente del terreno se pude ver una lona verde de donde cuel ga el cartel del merendero.

 

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