El 45% de los venezolanos emigra a Argentina, que es el quinto país de acogida de la población migrante de esa nación, con más de 130.000 personas recibidas, de las cuales la mitad llegó el año pasado. Solo durante 2018 se resolvieron en Salta 2.977 radicaciones: 1.076 permanentes y 1.901 temporarias.
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El 45% de los venezolanos emigra a Argentina, que es el quinto país de acogida de la población migrante de esa nación, con más de 130.000 personas recibidas, de las cuales la mitad llegó el año pasado. Solo durante 2018 se resolvieron en Salta 2.977 radicaciones: 1.076 permanentes y 1.901 temporarias.
Las cifras, desprendidas de los registros de la Dirección Nacional de Migraciones, resaltan en el informe "la realidad invisible, la integración pendiente de los migrantes" del grupo Adecco.
El exhaustivo trabajo expone los perfiles de los migrantes venezolanos que se integran a la fuerza laboral local y el impacto de esta incorporación en el sistema previsional argentino.
En cuanto a su formación, el 51,6% posee título terciario o universitario completo. Dentro de ese porcentaje, el 15,1% cuenta con maestrías o posgrados.
Independientemente de su formación académica o experiencia, el 39,02% manifestó que se desempeña en tareas relacionadas con el comercio, retail y servicios (repositor/a, cajero/a, vendedor/a, encargado/a o mozo/a). El 13,28% dijo ser independiente (consultor, cuidado de personas, trabajo en casas particulares, chofer de Uber y cadetería). El 12,14% indicó que se incorporó a algún trabajo vinculado con la industria (ingeniería, control de producción, construcción, jefe de depósito) y 35,55% manifestó estar desempleado.
Adecco, filial argentina de un grupo líder en consultoría integral en recursos humanos, firmó un compromiso junto con otras nueve instituciones y empresas para ayudar a contribuir con la situación de las más de 165.000 personas que, frente a situaciones de persecución étnica, religiosa, política, conflictos armados u otras causas, tuvieron que huir de sus países y llegaron a Argentina. La migración venezolana es, por lejos, la más notoria.
El compromiso fue rubricado por la International Chamber of Commerce y la Cámara Argentina de Comercio, WeWork, Manpower, Randstad, Banco Ciudad, Grupo Adecco, Accenture, Wix y Bubbo. Las firmas y entidades firmantes se comprometieron a facilitar oportunidades de empleo digno, promover instancias de capacitación, desarrollar acciones de promoción de la empleabilidad, brindar apoyo a emprendimientos y generar acciones de difusión y sensibilización sobre la temática.
Alexandra Manera, referente de Adecco para Argentina y Uruguay, comentó: "Es fundamental promover liderazgos que gestionen la diversidad multicultural. Cuando logramos que los mandos medios sponsoreen esta idea se perciben equipos de trabajo creativos, un clima de respeto, se facilita la escucha, se fortalece la innovación y esto repercute a nivel laboral".
La compañía también firmó días atrás un compromiso con Acnur, la agencia de la ONU para los refugiados, en procura de la inserción socioeconómica de personas refugiadas, a través de la iniciativa "Talento sin Fronteras Argentina", reveló la directora de Recursos Humanos de Adecco para Argentina y Uruguay, Alexandra Manera.
La industria petrolera, un imán para los ingenieros
Los profesionales venezolanos cubren determinadas capacidades en el país.
El boom de Vaca Muerta expuso la falta de profesionales
Según datos de la Dirección de Migraciones, más de 16.000 ingenieros venezolanos, con distintas especializaciones, se radicaron en Salta y otras provincias argentinas entre principios 2016 y fines de 2018.
Talent Recruiters, empresa que selecciona personal para la industria del gas y el petróleo, aclaró que aún así existe un déficit de ingenieros, por el bajo número de graduados que hay en comparación con otras profesiones.
En el país los ingenieros venezolanos cubren determinadas capacidades que son requeridas, como la ingeniería en petróleo, en perforación, eléctrica, y en áreas relacionadas con las geociencias como la geofísica y el petrofísica.
La demanda de talento en la industria hidrocarburífera, a partir del boom de Vaca Muerta, puso en primer plano la escasez de ingenieros y la reducida oferta de carreras relacionadas con la exploración y extracción de hidrocarburos (Salta, Patagonia, Comahue, Cuyo, La Plata e ITBA).
“Existe cierta resistencia para la contratación de mano de obra extranjera en pos de valorizar la mano de obra local, lo que se vislumbra desde el interior de las empresas, más aún para posiciones de management (gestión y dirección). Hasta los sindicatos han alzado la voz por ello”, advirtió la directora de Talent Recruiters, Jimena Ferreño.
Sin embargo, en los últimos dos años, se notó una clara apertura. “Esto tiene que ver, por un lado, con la escasez de talento profesionalizado técnicamente y, por otro, con las pretensiones económicas de candidatos locales, que a veces no se corresponde con el seniority (categoría y experiencia) que manejan”, explicó la ejecutiva de Talent Recruiters.
En el Noroeste Argentino, Cuyo y la Patagonia la industria del gas y el petróleo paga salarios sensiblemente mayores a los de otros sectores industriales. Esto funciona como un imán para ingenieros extranjeros, principalmente, venezolanos.
“En el proceso de reclutamiento los profesionales extranjeros se muestran más abiertos en la comunicación, flexibles y con capacidad de adaptación a distintos regímenes de trabajo, zonas de operación aledañas y propuestas económicas: prevalece absolutamente su inserción en un mercado local ávido de sus saberes”, acotó Ferreño.