La autopsia de Darío Gastón Badaracco, detenido por la muerte de Araceli Fulles y asesinado en el penal de Sierra Chica, reveló que “sufrió la acción prolongada de agua hirviendo”.
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La autopsia de Darío Gastón Badaracco, detenido por la muerte de Araceli Fulles y asesinado en el penal de Sierra Chica, reveló que “sufrió la acción prolongada de agua hirviendo”.
Los investigadores, según informa Clarín, sospechan que sus dos compañeros de celda le hicieron tragar agua hirviendo antes de matarlo, la tarde del 7 de abril.
Eso le produjo quemaduras gravísimas en más del 50% de su cuerpo, pero sobre todo en la cara y la boca. “Lo atacaron con saña”, añadieron.
Por eso, el fiscal Lucas Moyano imputó a los presos Rodrigo Emanuel Campos Verón y Silvio Andrés Galeano Martínez por "homicidio agravado por ensañamiento".
Las pericias complementarias a la autopsia determinarán si sus compañeros de celda, además de tirarle agua hirviendo con una olla, también se la hicieron tragar.
“Lo golpearon, lo patearon y le tiraron agua hirviendo sobre el rostro, tórax, abdomen, región inguinal y piernas”, detallaron fuentes del caso.
La muerte de Araceli
El presunto asesino de Araceli se encontraba a disposición del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de San Martín, procesado con prisión preventiva por el delito de "homicidio doblemente calificado".
Araceli (22) fue vista con vida por última vez la madrugada del 2 de abril de 2017, en una plaza cercana a su casa y su cuerpo fue hallado el 27 del mismo mes, gracias a la intervención de perros de Punta Alta, debajo de unos escombros en el patio de la casa de Badaracco, en Alfonsina Storni 4477 de José León Suárez, partido de San Martín.
La autopsia determinó que la joven murió por "asfixia mecánica" por "estrangulamiento a lazo" con un elemento compatible con precintos plásticos.
Badaracco declaró tres veces como testigo antes de ser imputado y se mantuvo prófugo un día, hasta que la noche del 28 de abril fue detenido detrás de la villa 1-11-14 del Bajo Flores porteño gracias a una vecina que lo reconoció por la calle.