¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

18°
25 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Trump moviliza recursos militares para detener disturbios y saqueos

El presidente de EEUU “recomendó” a cada gobernador desplegar la Guardia Nacional.
Lunes, 01 de junio de 2020 20:47

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el domingo el despliegue de “miles y miles de soldados fuertemente armados” y de agentes de la ley para detener los disturbios en Washington DC.
“Estoy movilizando todos los recursos federales, civiles y militares disponibles para detener los disturbios y los saqueos para poner fin a la destrucción y los incendios provocados y para proteger los derechos de los estadounidenses que respetan la ley”, dijo el mandatario en un discurso en la Rosaleda de la Casa Blanca.
En concreto, informó que han tomado “medidas rápidas y decisivas para proteger” la capital estadounidense, que vivió su segunda noche de toque de queda, con el despliegue de soldados.
“Estoy enviando miles y miles de soldados fuertemente armados, personal militar y oficinas de aplicación de la ley para detener los disturbios, los saqueos, el vandalismo, los asaltos y la destrucción desenfrenada de propiedades”, afirmó Trump, al indicar que el toque de queda, que comenzó ayer cuatro horas antes, a las 19 hora local, en Washington DC “se aplicará estrictamente”.
Además se dijo dispuesto a desplegar al Ejército en las ciudades y estados que se nieguen a “tomar las medidas necesarias” para defender “la vida y la propiedad de sus residentes”.
“He recomendado enérgicamente a cada gobernador que despliegue a la Guardia Nacional en cantidades suficientes para que dominemos las calles”, aseguró Trump.
El mandatario urgió a los alcaldes y gobernadores a “establecer una aplastante presencia de agentes del orden hasta que la violencia haya sido sofocada”.
“Si una ciudad o estado se niega a tomar las medidas necesarias para defender la vida y la propiedad de sus residentes, entonces desplegaré el Ejército de los Estados Unidos y resolveré rápidamente el problema por ellos”, advirtió.
El jefe de la Oficina de la Guardia Nacional, el general Joseph Lengyel, indicó en su cuenta de Twitter que este lunes “17.015 soldados y aviadores de la Guardia Nacional están ayudando a agencias civiles locales y estatales que responden a disturbios civiles”.
Al final de su discurso en la Rosaleda de la Casa Blanca, Trump dijo que a continuación iría a “presentar sus respetos a un lugar muy, muy especial”.
Poco después, el presidente, rodeado de algunos de sus asesores, dio el extraordinario paso de salir a pie de la Casa Blanca y cruzar caminando la plaza de Lafayette para dirigirse a la iglesia episcopal de Saint John, en la que han rezado todos los presidentes de Estados Unidos desde el siglo XIX.
Trump posó para las cámaras con una Biblia en la mano frente a las ventanas tapiadas de la iglesia, cuyo sótano fue uno de los lugares donde algunos manifestantes prendieron fuego durante las protestas del domingo, aunque las llamas no provocaron daños.
“El mejor país del mundo. Y vamos a mantenerlo seguro”, aseguró Trump.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el domingo el despliegue de “miles y miles de soldados fuertemente armados” y de agentes de la ley para detener los disturbios en Washington DC.
“Estoy movilizando todos los recursos federales, civiles y militares disponibles para detener los disturbios y los saqueos para poner fin a la destrucción y los incendios provocados y para proteger los derechos de los estadounidenses que respetan la ley”, dijo el mandatario en un discurso en la Rosaleda de la Casa Blanca.
En concreto, informó que han tomado “medidas rápidas y decisivas para proteger” la capital estadounidense, que vivió su segunda noche de toque de queda, con el despliegue de soldados.
“Estoy enviando miles y miles de soldados fuertemente armados, personal militar y oficinas de aplicación de la ley para detener los disturbios, los saqueos, el vandalismo, los asaltos y la destrucción desenfrenada de propiedades”, afirmó Trump, al indicar que el toque de queda, que comenzó ayer cuatro horas antes, a las 19 hora local, en Washington DC “se aplicará estrictamente”.
Además se dijo dispuesto a desplegar al Ejército en las ciudades y estados que se nieguen a “tomar las medidas necesarias” para defender “la vida y la propiedad de sus residentes”.
“He recomendado enérgicamente a cada gobernador que despliegue a la Guardia Nacional en cantidades suficientes para que dominemos las calles”, aseguró Trump.
El mandatario urgió a los alcaldes y gobernadores a “establecer una aplastante presencia de agentes del orden hasta que la violencia haya sido sofocada”.
“Si una ciudad o estado se niega a tomar las medidas necesarias para defender la vida y la propiedad de sus residentes, entonces desplegaré el Ejército de los Estados Unidos y resolveré rápidamente el problema por ellos”, advirtió.
El jefe de la Oficina de la Guardia Nacional, el general Joseph Lengyel, indicó en su cuenta de Twitter que este lunes “17.015 soldados y aviadores de la Guardia Nacional están ayudando a agencias civiles locales y estatales que responden a disturbios civiles”.
Al final de su discurso en la Rosaleda de la Casa Blanca, Trump dijo que a continuación iría a “presentar sus respetos a un lugar muy, muy especial”.
Poco después, el presidente, rodeado de algunos de sus asesores, dio el extraordinario paso de salir a pie de la Casa Blanca y cruzar caminando la plaza de Lafayette para dirigirse a la iglesia episcopal de Saint John, en la que han rezado todos los presidentes de Estados Unidos desde el siglo XIX.
Trump posó para las cámaras con una Biblia en la mano frente a las ventanas tapiadas de la iglesia, cuyo sótano fue uno de los lugares donde algunos manifestantes prendieron fuego durante las protestas del domingo, aunque las llamas no provocaron daños.
“El mejor país del mundo. Y vamos a mantenerlo seguro”, aseguró Trump.

Toque de queda en NY

 La ciudad de Nueva York quedó anoche, hasta las cinco de la mañana, bajo toque de queda, algo que no ocurría en toda la ciudad desde los disturbios de Harlem de 1943, también ocasionados por motivos raciales.
No obstante, este toque de queda se da tras cuatro días seguidos de protestas, altercados con la policía y saqueos nocturnos en el corazón de Manhattan por la muerte en custodia policial el pasado 25 de mayo de George Floyd en Mineápolis (Minesota).
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, que días atrás se resistía a la medida que otras ciudades del país ya han tomado para devolver el orden, desplegará 4.000 policías más, para un total de 8.000, y prohíbe hasta las 5 de la mañana, hora local, todo movimiento no esencial.
En agosto de 1943 se tomó una medida similar después de que se extendiera el rumor de que un policía blanco había matado de un tiro a un soldado afroamericano.
La tensiones raciales ya existentes entonces estallaron y desembocaron en disturbios y el saqueo de más de mil negocios en el barrio de Harlem.
El alcalde en aquel momento, Fiorello La Guardia, ordenó el despliegue de varios miles de policías, que abordaron a los saqueadores, mataron a cinco personas y cargaron el cielo estival de Nueva York de tiros al aire. 

Temas de la nota

PUBLICIDAD