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San Isidro: una industria que apuesta a la economía circular a gran escala

El Grupo Ruiz, a cargo del ingenio desde el año 2018, tecnificó todos los procesos y llevó la producción a nuevas unidades de negocios con la visión de economía circular.
Domingo, 11 de junio de 2023 00:00

Una de las definiciones de la economía circular sostiene que es un modelo de producción y consumo en contraposición con la economía lineal que, al contrario de esta última, implica reutilizar, reparar, renovar y reciclar los materiales y productos existentes durante el mayor tiempo posible, con la gestión de los propios desechos.

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Una de las definiciones de la economía circular sostiene que es un modelo de producción y consumo en contraposición con la economía lineal que, al contrario de esta última, implica reutilizar, reparar, renovar y reciclar los materiales y productos existentes durante el mayor tiempo posible, con la gestión de los propios desechos.

Desde esta perspectiva, el Ingenio San Isidro, en Campo Santo, apunta a convertir su modelo de producción en una economía circular a gran escala, con las unidades de negocios que proyecta a través de la molienda de maíz para obtener alcohol de maíz y al mismo tiempo alimento para el ganado bovino, destinado al feedlot que comenzó a operar desde el año pasado, donde ya se trabaja en una proyección de 1500 cabezas.

Por otro lado el bagazo de la caña, es decir el desecho de la producción de azúcar, ya se utiliza en otras aplicaciones como por ejemplo al obtención de celulosa y material combustible.

Sobre este última actividad hay que decir también que San Isidro ha logrado migrar su producción de azúcar a la categoría orgánica en un 100 por ciento, lo cual significa que la totalidad de la producción azucarera del ingenio no utiliza fertilizantes sintéticos ni ningún otro agroquímico, con lo cual ha conseguido una certificación para colocar el producto a nivel internacional con los más altos estándares de calidad natural.

Diego Ruiz, directivo del Grupo Ruiz, la empresa agroindustrial que se hizo cargo del ingenio San Isidro en 2018, aseguró que la producción y la industria tuvieron una notable evolución hacia las economías circulares y el cuidado del ambiente. "Antes se quemaban los cañaverales en perjuicio de las comunidades más próximas y eso se prohibió, lo cual nos obligó a tecnificarnos y al mismo tiempo a abrir nuevos proyectos con la idea de un aprovechamiento integral de toda la producción. Toda la cosecha es mecánica y los residuos son reaprovechados a distintas escalas".

 

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