Kike Teruel desde muy pequeño empezó a soñar con los acordes musicales...y también con los grandes escenarios. Creo que la vida le sonrió a través de los años, logró cumplir con su objetivo. Dicen muchas veces que es complicado llegar a la cima, pero aún es más difícil mantenerse. Él integra una agrupación que ocupa las primeras páginas del libro dorado del folclore: Los Nocheros.
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Kike Teruel desde muy pequeño empezó a soñar con los acordes musicales...y también con los grandes escenarios. Creo que la vida le sonrió a través de los años, logró cumplir con su objetivo. Dicen muchas veces que es complicado llegar a la cima, pero aún es más difícil mantenerse. Él integra una agrupación que ocupa las primeras páginas del libro dorado del folclore: Los Nocheros.
"No tengo dudas que la vida me sonrió, y cuanta generosidad", fueron las primerass palabras del "nochero".
César Adolfo (su nombre de pila) tomó la determinación de alejarse del consagrado conjunto salteño, y aceptó gentilmente una charla con diario El Tribuno.
La gente está sorprendida, y aún no sale de su asombro por tu decisión de dar un paso al costado.
Esto es como que que te separés de tu pareja que te llevás bien, lo digo por hacer una similitud con mi partida del grupo. Con los chicos me llevo súper bien, estamos en un momento muy lindo de relaciones, nunca tuvimos problemas, esa es la realidad. Pero bueno, esto es absolutamente una decisión personal donde yo doy por concluida mi etapa musical, absolutamente pensando en mí. Hace 37 años que pienso por cuatro, siempre fui el motor de muchos proyectos de "nocheros". Mi vida siempre giró en eso, no es un reproche, al contrario, me retiro con la frente alta y muy tranquilo de que hice todo, y por eso los chicos me entendieron. Quiero hacer algo por mí y lógicamente por mi familia. Estoy en una nueva etapa de mi vida. Es cerrar un ciclo y arrancar el que corresponde. Tengo muchos proyectos empresariales, me dedicaré de lleno a eso.
En tu decisión ¿tuvo alguna incidencia el fallecimiento de La Moro, y y luego de papá?
Nada que ver, porque Mario, Rubén y Alvaro, lo saben desde septiembre del año pasado. No lo dije antes porque primero había que cerrar todas las fechas del verano, y no queríamos crear una confusión en la gente y tampoco en los poductores. Pero bueno, tuvimos esas desgracias que son situaciones de la vida. Mi papá, gracias a Dios, se fue bien, vivió una vida hermosa. Lo de La Moro fue un golpe duro.
En casi cuatro décadas sobre los escenarios ¿qué te dio el grupo? ¿Y qué te quitó?
Quitarme nada, porque fue una elección. Lo que yo no pude hacer o haya perdido momentos familiares, momentos personales o postergaciones por el grupo, fue una elección propia. En contrapartida, el el conjunto me dio todo, sobre todo esta situación maravillosa de comunicarme con la gente mediante una canción. Esta profesión me moldeó el carácter, me enseñó a compartir de otra manera. Junto a Los Nocheros conocí a mi señora Karina, con quien llevamos felices 35 años. Mis cuatro hijos se criaron al lado del escenario, conocieron al "nochero" que cantaba en las peñas, y luego al "nochero" que logró innumerables logros. Un balance altamente positivo.
Seguirás siendo un "nochero"...
Lógicamente, Los Nocheros me enseñaron a cantar. Lo seguiré siendo porque musicalmente no voy a dedicarme a nada más, mi voz va a quedar para toda la vida ahí, y mi alma y mi corazón jamás tomarán distancia del grupo.
¿Te interesa la política?
Me gusta mucho, pero la verdad me muero si mañana creen que una puerta de mi casa la hice con plata de la política. La gente es lapidaria y en muchas ocasiones está en lo cierto, porque todas las cosas que ocurrieron en las últimas décadas. Me hablaron de todos los partidos y mi respuesta fue: no. La gente de mi provincia en gran medida me conoce pero por mi canto ¿quién me va a querer votar? Y si tenés ideas nuevas, como está hoy la política del país, no lo podés hacer. Hay un cierto modo de trabajo que yo todavía no comparto. Por eso digo, sí me encanta, de hecho siempre hice política en el conjunto.
Yo cuando empecé a cantar me costó mucho porque mi voz era limitada y debía trabajar en demasía. Mi esfuerzo y perseverancia pudieron más y alcancé los objetivos. Con los instrumentos me paso lo mismo, lo único que tocaba bien desde pequeño era el charango, mi guitarra era muy básica y también trabajé para superarme. Con la política me gustaría hacer lo mismo, primero debo intruirme, aprender, y luego ver dónde puedo servir. Siempre fui una persona prolija, lejos de improvisar y a esta altura de mi vida no voy a cambiar.