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La película "Senda India", de Daniela Seggiaro, será estrenada en el Malba -Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires- el viernes próximo y podrá verse también los días 12 y 19 de septiembre, siempre a las 20, en ese espacio de CABA. De este modo, continúan las presentaciones de este largometraje documental dirigido por la realizadora salteña y producido por Maravillacine, ya que viene de participar de la última edición de DOC Buenos Aires.
Concluido el domingo 24 de agosto, ese festival internacional programó una retrospectiva del cine de Seggiaro, se pudieron ver "Nosilatiaj" y "Husek", completando una trilogía que tiene como eje al Chaco salteño y al pueblo wichí que habita, entre otros, ese territorio.
Archivos audiovisuales pertenecientes a una comunidad fueron el material valiosísimo que, en un documental con guion y dirección de Daniela, recupera la pertenencia al monte, a un idioma y a la vida en comunidad como bases fundantes de un reclamo vital. El Tribuno habló con la realizadora. Comenzamos por la experiencia vivida en agosto.
Contanos sobre mostrar una retrospectiva de tu cine en el último DOC.
En el DOC Buenos Aires se estrenó "Senda India"; es una muestra que tiene 25 años, y siempre se hizo ahí, en la Sala Lugones. Fue importante también como una muestra de formación en la que uno participó mucho mientras era estudiante de Cine. Y, bueno, fue muy lindo que se les haya ocurrido no solo estrenar "Senda India", sino ponerla en relación con las otras películas anteriores que hice, "Nosilatiaj" y "Husek". Y si bien las dos son películas de ficción, un poco lo comentaba Roger Koza... él pensó como programador que, de alguna manera, "Senda...", siendo una película documental, ilumina un recorrido de la ficción, que se puede leer también en conjunto, más allá de esa diferencia de forma, sobre todo de producción y de formatos . Entonces, estuvo muy lindo. Hay personas que fueron a ver todo, porque es lindo cuando hay una propuesta así, desde la curaduría de un festival. Algunas personas se engancharon en la idea y fueron a ver las tres películas en orden, y eso fue muy motivador. Después, para el momento de preguntas, se hizo algo muy rico. La verdad que estuvo increíble. Y en la Sala Lugones, que es una sala que aloja al DOC hace tanto tiempo, y que tiene su público, su cinefilia, digamos.
Muchas personas no conocen tu filmografía. ¿Qué llevó a que programaran las tres películas? ¿De qué tratan? ¿Qué las une?
Hay personas que no la conocen, claro, pero también hay muchas que sí, o que vieron "Husek" y que no habían visto "Nosilatiaj", o que ahora vieron "Senda india" y no habían visto las anteriores. Por suerte, son diferentes lugares... O hay gente que conoce "Husek" y dice "yo vi una película que tenía que ver", y están hablando de "Nosilatiaj", y ahora está relacionando que es el mismo grupo de gente que las está haciendo... ¿Y qué las une? Hay un hilo conductor, que es sobre todo un pueblo en particular, el pueblo Wichí, un idioma en particular, el Wichi lhämtès, y un territorio que es la zona del Chaco salteño. Después, cada película es una nueva propuesta al interior de ese territorio, para observar la relación entre el mundo criollo, o el mundo blanco, y el mundo wichí, ¿no? Entonces, todas las películas ponen un poco en tensión esa relación.
Hay un hilo conductor, que es sobre todo un pueblo en particular, el pueblo Wichí, un idioma en particular, el Wichi lhämtès, y un territorio que es la zona del Chaco salteño".
¿Cómo describirías esa tensión en cada una?
"Nosilatiaj" quizás desde un lugar más doméstico y "Husek" en un espacio ya más vinculado a los proyectos de desarrollo, al mundo de la política, ¿no? Y "Senda" pone en tensión el mundo jurídico y, en contraposición, el monte. Y el pedido territorial visto desde adentro. Entonces sí, es verdad que hay algo, que hay un punto de vista ya en "Senda". En todo este recorrido, hay como una reflexión sobre el punto de vista en las tres películas, pero ya en "Senda" hay algo que es la perspectiva indígena, dando cuenta de algo muy interno -y si bien el pedido territorial es algo comunitario y que está en relación con el mundo político y el mundo jurídico y genera todo un impacto grande, vinculado también a la historia política del país-, también hay algo muy íntimo en el material, porque fue filmado por las personas de la propia comunidad en los años 90. Entonces, también se accede a algo muy íntimo de la relación con el monte, con ese pedido territorial, algo esencial, ¿no? Y se accede a la importancia de ese monte, a los saberes que realmente la gente tiene en relación con el monte. Es el monte como una gran farmacia, como un gran boticario. Hay algo de todo ese recorrido también que uno va haciendo en la propia búsqueda... en el camino de trabajar con este territorio, digamos.
Hay algo muy íntimo en el material, porque fue filmado por las personas de la propia comunidad en los años 90. Entonces, también se accede a algo muy íntimo de la relación con el monte, con ese pedido territorial, es algo esencial".
¿Qué recorrido va a tener "Senda India" próximamente?
Y ahora le toca su estreno en Buenos Aires, ya se presentó en Salta (en la Semana de Cine), ya se presentó en la comunidad, ya tuvo algún estreno internacional, y ahora está transitando su estreno en Buenos Aires. Después del DOC Buenos Aires, ahora va a estar en Malba, todos los viernes de septiembre a las 20 horas. También en el Centro Cultural Borges, son varios horarios, allí también se puede acceder a la película. Así que, bueno, durante septiembre arrancamos después de su estreno. En el DOC Buenos Aires fue la primera vez que se vio acá. Ahora le toca esta ciudad y después "Senda India" continuará por todos los lugares que la quieran alojar, y también podrá convertirse en un material de trabajo, en un documento como película, esa es una posibilidad... Entonces, una vez pasado su estreno, ya va a circular por todos los lugares que quieran pasarla.
¿Cómo fue el proceso de encontrarte con un material que, creo, no pensaba estar en una película? ¿Cómo fue ese encuentro con la gente que lo hizo?
Creo que las personas que filmaron ese material en los años 90 tenían una intención de que se convirtiera en una película... Yo, al principio, conocí una partecita de un material muy chiquita, que me había sido justamente enviada porque gente de la comunidad se había enterado que yo era salteña, que estudiaba cine y me lo enviaron. Y creo que esa era una práctica que hacían en un momento dado y, después, ese material quedó, por las cuestiones de la tecnología, de que una cámara se rompe y uno no sabe cómo ver un cassette, no hay una casetera que lo reproduzca, cosas como esas... Entonces, todo ese material quedó guardado, pero cuando yo me acerqué a hacer la propuesta de empezar a pensar una película, no sabía que había tanto filmado. Sabía que había esta parte que ya había visto y sabía también que había un contexto muy interesante para pensar una película. Porque es muy particular el proceso de tanto tiempo que hizo esta comunidad. Actualmente, ganó el juicio, pero que fue un proceso muy largo y anterior incluso a la reforma constitucional, con lo cual tuvieron que utilizar estrategias jurídicas muy interesantes para el pedido de su territorio. Estábamos interesados en eso. Y resultó que el material original era muy vasto, tenía muchas horas, había mucho filmado y hubo un entusiasmo muy grande porque -eso que te decía- había una intención de que toda esa gran experiencia se convierta en una película. Por eso Miguel Ángel Lorenzo, que fue principalmente el camarógrafo que filmó estos materiales, estaba tan interesado en confiarme esas grabaciones; y cuando yo comencé a editarlo, lamentablemente Miguel falleció poco tiempo después. Y a medida que yo fui editando y encontrándome con su mirada, con su forma de narrar, con su forma de usar la cámara, de apropiarse de esta herramienta... me di cuenta de que sí que había una intención muy fuerte de hacer una película. Así que siento mucha gratitud por esta oportunidad de haber sido puente para que esto se haga y se vea... y acceda a las principales pantallas y a todas las pantallas, que haya un acceso a este material. Entonces, un poco eso, el cine se vuelve un puente para acceder a esa historia y a la perspectiva indígena que está impresa en este material...