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Tigre presentó en la AFA la nota en la que oficializa su descargo por lo ocurrido en la noche del miércoles, cuando sus jugadores fueron agredidos al término del primer tiempo de la segunda final de la Copa Sudamericana, ante San Pablo, en Brasil.
La entidad de Victoria, en una misiva firmada por su presidente, Rodrigo Molinos, elevó la presentación que será remitida a la Confederación Sudamericana (Conmebol) en la que se solicita “la prosecución del encuentro”, reveló una fuente de AFA.
En principio, el titular del organismo, Julio Humberto Grondona, se pondrá al frente de la situación la semana entrante, cuando regrese de Japón, una vez concluido el Mundial de Clubes.
De todos modos, es poco probable que el partido pueda continuar y Tigre a lo sumo podrá aspirar a la suspensión del estadio Morumbí y a una multa económica, nada más.