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La fuerte tormenta llegó acompañada de un temporal de granizo, con piedras de mediano
tamaño.
En un inusual fenómeno climático para la zona centro del país, por lo menos 14 personas murieron y otras 18 resultaron heridas a raíz del fuerte temporal de lluvia y granizo, con vientos superiores a los 90 kilómetros por hora, que azotó el miércoles a la Capital Federal, la provincia de Buenos Aires y Santa Fe. Hubo caída de techos, cortes de energía e inundaciones: el panorama era literalmente desolador. Tal como ocurre en la mayoría de estos fenómenos climáticos, los principales afectados fueron los que poseían viviendas más humildes. El temporal del miércoles volvió a reabrir el debate sobre la importancia de tener casas fuertes en detrimento de soluciones habitacionales, mucho más frágiles en su construcción.
La cifra de decesos se duplicó en apenas unas horas, mientras ayer avanzaban los trabajos de Defensa Civil para determinar el número de víctimas de la tormenta. Las calles de la ciudad de Buenos Aires y sus alrededores amanecieron ayer con numerosos bloqueos por la caída de árboles y postes de luz, además de las inundaciones y otros destrozos que causó la tormenta.
Por otro lado, unas 500 personas fueron evacuadas por seguridad, informó el coordinador del Consejo de Emergencias bonaerense, Luciano Timerman.
El temporal, que se extendió hasta ayer a la madrugada en algunas zonas, también ocasionó cortes de energía eléctrica en numerosos barrios y la interrupción de servicios de trenes que parten de la ciudad.
También motivó complicaciones en el tránsito, en momentos en que miles de personas viajan a distintos puntos del país por la Semana Santa.
Las víctimas fatales
Tres personas murieron en un asentamiento del barrio porteño de Barracas cuando cayó sobre ellos el techo de la vivienda precaria en la que residían; en tanto, otro hombre falleció en la zona de Flores al caer una medianera.
En el conurbano bonaerense, también hubo ocho personas fallecidas por aplastamiento y electrocución, precisó Timerman. Los fallecimientos ocurrieron en las localidades bonaerenses de Moreno -donde murieron cuatro personas-, en Gonnet, Avellaneda, Quilmes e Isidro Casanova. A esa cifra se sumó otro deceso ocurrido tras el derrumbe de un paredón en el distrito bonaerense de Florencio Varela, donde también ocho habitantes resultaron heridos a causa del temporal. La tormenta también azotó a la provincia de Santa Fe, donde un joven de 19 años murió ayer electrocutado luego de pisar un cable del tendido eléctrico que fue cortado por el temporal.