El pequeño ahorrista de dólares ha sido puesto en la veda cambiaria. La política impositiva y la cambiaria, en asociación, estimulan que no se atesore dólares y sí que se ahorre tomando el variado menú que hay en pesos. Es por esto que en Salta, desde el jueves pasado, los compradores de sumas pequeñas de dólares no son autorizados por el sistema informático de la AFIP, que le contesta: “falta capacidad económica para la operación”. Ni cien dólares pueden adquirir.
Las casas de cambio y los bancos solo proveen la demanda del billete verde para operaciones estrictamente comerciales, inclusive algunas superan los 20 mil dólares, pero siempre con la autorización de la AFIP.
Se cambian los pesos por dólares para compras urgentes de medicamentos, automóviles y otros bienes, cuyos orígenes del dinero tengan justificación y su dueño solvencia. Una parte del sector privado, el pequeño ahorrista, quedó fuera de la prioridad de la política del Central, que es entregar la divisa en las grandes inversiones. El Central con esta sequía para los “chicos”, está demostrando que quiere los dólares para él.
La última compra del organismo fue por 130 millones de dólares y se sigue recalentando en todo el país (inclusive Salta) el mercado en negro. En el mercado paralelo un dólar costó ayer $5,76, es decir, 14 centavos menos que un euro. Falta poco para que el dólar en la marginalidad monetaria valga como un euro.
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El pequeño ahorrista de dólares ha sido puesto en la veda cambiaria. La política impositiva y la cambiaria, en asociación, estimulan que no se atesore dólares y sí que se ahorre tomando el variado menú que hay en pesos. Es por esto que en Salta, desde el jueves pasado, los compradores de sumas pequeñas de dólares no son autorizados por el sistema informático de la AFIP, que le contesta: “falta capacidad económica para la operación”. Ni cien dólares pueden adquirir.
Las casas de cambio y los bancos solo proveen la demanda del billete verde para operaciones estrictamente comerciales, inclusive algunas superan los 20 mil dólares, pero siempre con la autorización de la AFIP.
Se cambian los pesos por dólares para compras urgentes de medicamentos, automóviles y otros bienes, cuyos orígenes del dinero tengan justificación y su dueño solvencia. Una parte del sector privado, el pequeño ahorrista, quedó fuera de la prioridad de la política del Central, que es entregar la divisa en las grandes inversiones. El Central con esta sequía para los “chicos”, está demostrando que quiere los dólares para él.
La última compra del organismo fue por 130 millones de dólares y se sigue recalentando en todo el país (inclusive Salta) el mercado en negro. En el mercado paralelo un dólar costó ayer $5,76, es decir, 14 centavos menos que un euro. Falta poco para que el dólar en la marginalidad monetaria valga como un euro.