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Ella es Analía del Franco, directora de la Consultora Analogías. Tras la semana complicada que pasó el kirchnerismo y su conductora, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, la analista política advirtió que fue el Gobierno el que quedó mejor parado a raíz del paro nacional convocado por el líder camionero Hugo Moyano.
En este sentido Del Franco manifestó: “la Presidenta logró enmarcar la demanda de Moyano y dejó en claro lo que hizo este gobierno con la sociedad y los trabajadores. Me parece que eso ayudó a dejar sin valor la movilización y el acto”.
En diálogo con El Tribuno, la consultora advirtió que el camionero, pese a la enorme relevancia que tomó en los últimos días, quedó en una posición “insignificante, teniendo en cuenta sus aspiraciones políticas”.
Por otra parte, destacó que el camionero no contó con el apoyo que esperaba y que la oposición -pese a los ambages de acompañarlo en la movilización, a excepción de algunas organizaciones de izquierda- titubeó y no participó de la movilización.
¿Cuál es su opinión respecto al efecto que causó el paro de Moyano?
Tengo la sensación de que el paro- movilización, que por momentos fue más movilización que paro, quedó totalmente desdibujado. Sin duda alguna, la medida de fuerza quedó con muy poca relevancia para las expectativas que había.
¿Y dónde lo dejó ubicado a Moyano?
Pienso que lo deja a Moyano en un lugar políticamente insignificante. Lo saca de contexto político, teniendo en cuenta las aspiraciones políticas que dejó entrever.
Por otro lado están los reclamos salariales que hizo...
En relación con las demandas que se hizo desde el sector corporativo, laborales, también quedaron un poco recortadas y desvalorizadas. Armar un acto de esa naturaleza para una sola demanda y no poner en la consigna la incorporación de los trabajadores en negro, por ejemplo, es una cosa de locos.
¿Cree que se trató de una postura sectaria?
Más que sectaria, es una postura sin nada de consistencia. Si uno quiere que la masa de los trabajadores en el mercado lo apoyen y también estén quienes trabajan en una situación que no está regularizada habría significado un gesto de grandeza de su parte armar un acto nacional incluyendo esas demandas.
En este sentido, interpreto que como hecho político quedó totalmente insignificante a lo que parecía que venía.
En este contexto, el Gobierno parecía que venía golpeado. ¿Cómo salió parado del ataque de Moyano?
Bien. Quedó bien Cristina y el Gobierno nacional porque lo de Moyano se infló mucho y parecía que la oposición lo iba a apoyar. Además no se puede decir que hubo un paro nacional. De ninguna manera, teniendo en cuenta el casi nulo porcentaje de acatamiento.
En este contexto es preciso tener en cuenta que el Gobierno y la Presidenta, especialmente, puso mucho el cuerpo y dedicación para ubicarse en esta situación.
¿Cómo sería eso?
Independientemente de que su discurso del martes pasado (de Cristina Fernández) fue muy extenso y probablemente no toda la gente pudo escucharlo o interpretarlo en su plenitud, me pareció que significó bien qué era lo que se estaba pidiendo y el significado de la medida de fuerza.
Era una demanda no de poco valor pero sí incompleta para movilizar a la gente de esta manera.
Entonces, a pesar de que la Presidenta pudo aparecer como reiterativa, logró enmarcar la demanda de Moyano y dejó en claro lo que hizo este gobierno con la sociedad y todos los trabajadores. Me parece que eso ayudó, sin dudas, a dejar sin valor la movilización y el acto.
Pero en esta medida de fuerza, el camionero contó con algunos apoyos por fuera de la CGT...
Me pareció raro el apoyo de la izquierda. Fueron los únicos. Es que fue una convocatoria demasiado corporativa. Por más que él (Hugo Moyano) sea opositor y haya muchos en ese arco, y de algunos manera se vean compenetrados, de ahí a adherirse hay una enorme distancia.
Con este hecho, la Presidenta ubicó en la vereda de enfrente a Moyano...
Es donde se ubicó él. Me parece que ya se ubicaron desde hace un tiempo.
¿Qué le pareció el discurso de Moyano?
La verdad es que el discurso de Moyano fue un discurso flojo. Flojo en el sentido de consignas, de ideas. Mi pregunta es si el discurso fue flojo porque le salió así, porque no tenía más nada que decir o porque realmente no quería recrudecer la distancia con la Presidenta.
Pero en los últimos días tanto la Presidenta como Moyano parecen haber bajado los decibeles...
A mi entender, la Presidenta dijo todo lo que hay que decir. Si dijera más, se excedería. Pensando que iban a confrontarlos (los medios de comunicación) logró un discurso más medido, constructivo, de futuro, dándole participación a la gente y sacando el enojo de por medio con Moyano.
Y en este contexto ¿dónde entra el gobernador Scioli?
Scioli quedó en un “ni”. Las diferencias que tiene la Presidenta con Scioli exceden a lo de Moyano.
¿Y un “ni” más cerca de dónde?
No sé. Por ahí. Me parece que Scioli todavía no se ubica. Igual me parece que no está mal para las aspiraciones políticas que él tiene. Probablemente sea su estrategia. Tal vez esa sea la idea, el hecho de no tomar partido por algo específico a cuatro años. El viene acompañando a Cristina, pero me parece que ahora tomó un camino nuevo y a lo mejor esté tratando de mantenerse distante del Gobierno nacional.
Entonces, hoy por hoy, ¿Moyano es referente de la oposición?
No, me parece que no. Para los opositores, Moyano es un arma de doble filo. Entiendo que puede dar un impulso, pero no da garantías para ir detrás de él. Además, la oposición está a la deriva, pero tampoco son tan flojos. Es que hay que tener en cuenta que Moyano tiene un 23% de imagen positiva y el resto negativo. Esto le baja la credibilidad como un referente opositor. Por eso realmente la oposición política no adhiere.
Entonces creo que verdaderamente nunca fue un referente de la oposición. Quizá pudo haberlo parecido hace diez días pero en los últimos días quedó expresado que no es así.