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Escribo para aclarar al Sr. Luis Andolfi algunos puntos sobre su nota de la sección Orsai del 15/7/12. Evidentemente desconoce que en nuestro sistema jurídico, la Justicia no tiene potestad para imperar conductas a nivel general e in abstracto, sino solo en los casos sometidos a su examen y resolución; para eso son jueces, no legisladores. Ningún gobierno ni ciudadano debe “hacerle caso” a una sentencia en la que no es parte ni ha intervenido. La famosa alocución “interrupción del embarazo” unida a las falaces reivindicaciones de los “derechos de la mujer”, “la dignidad de las víctimas”, etc., no hacen más que soslayar el crimen más atroz: el asesinato del ser humano más inocente en su estado de mayor indefensión: el niño por nacer. ¿Es que los derechos del niño incluyen el fomento de su homicidio? Solo en una sociedad hipócrita y desvergonzada. El hombre no es dueño de la vida y no tiene derecho a disponer de ella ni autorizar a hacerlo. Nadie tiene derecho a matar a otro, ni lo tendrá por más que todos los jueces, legisladores y gobiernos dispongan lo contrario.
Pablo Palacios Fenoglio
Ciudad