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Gabriel García Márquez, de 84 años, padece demencia senil, se supo ayer a partir de declaraciones de su hermano Jaime, quien destacó no obstante que “todavía conserva el humor, la alegría y el entusiasmo que siempre ha tenido”. Y agregó: “Desde el punto de vista físico está bien, aunque ya tiene algunos conflictos de memoria”, que se agravaron por el cáncer linfático que superó en 1999.
“En la familia todos sufrimos de demencia senil y él ya tiene los estragos que se le adelantaron, debido al cáncer que lo puso en una situación casi de muerte. La quimioterapia le salvó la vida, pero también acabó con muchas neuronas, muchas defensas y células, y se le aceleró el proceso”, dijo.
Sin embargo, el hermano de “Gabito”, nombre con el que se refirió en todo momento al premio Nobel, aseguró que todavía se puede hablar con él, “con mucha alegría y entusiasmo, como siempre ha sido. Siempre lleno de humor”.
Jaime explicó que el estado de salud de su hermano es una noticia que, por diferentes razones, han mantenido “un poco entre bambalinas” porque se trata de su vida y él siempre ha intentado protegerla”
Jaime García Márquez lamentó que su hermano no esté en condiciones de escribir la segunda parte de su biografía “Vivir para contarla”, ni ninguna otra obra. “Desgraciadamente creo que no va a ser posible, pero ojalá esté equivocado”, dijo, emocionado, el presidente de la Fundación Nuevo Periodismo.