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Cerca de 400 personas fueron atendidas por los servicios sanitarios este fin de semana en la ciudad española de Pamplona, donde el sábado dieron comienzo los sanfermines y ayer se celebró el segundo encierro de estas fiestas mundialmente conocidas. Según informaron la Cruz Roja y servicios sanitarios, esas personas fueron atendidas por distintas patologías, al margen de las asistencias prestadas a los heridos en los dos encierros que se celebraron.
Entre las causas citadas, algunos de los asistentes a la multitudinaria fiesta tuvieron que ser atendidos por intoxicaciones etílicas y otros por politraumatismos.
Dos internados que mejoran
Entretanto, los dos jóvenes españoles que fueron ingresados ayer en un hospital de Pamplona tras el segundo encierro de los sanfermines presentan pronóstico menos grave, según el último parte médico.
Un hombre de 35 años sufrió una fractura vertebral, mientras que otro de 29 años resultó policontusionado y con fractura nasal.
También continúa ingresado en el hospital el corredor de 73 años que el sábado fue alcanzado por el asta de un toro en el primer encierro de estas fiestas.
El protagonista fue “Navajito”
“Navajito”, un toro negro de la ganadería sevillana de Eduardo Mira, fue ayer el protagonista del encierro, el más concurrido de los sanfermines. Ayer por la tarde un buen número de visitantes abandonó la ciudad tras haber aprovechado el fin de semana para disfrutar de la fiesta.
En esta jornada se recordó también a Germán Rodríguez, muerto de un disparo durante los graves sucesos registrados en 1978 y que llevaron a la suspensión de las fiestas ese año. Ante su estela en el centro de la ciudad se celebró una concentración con distintas intervenciones políticas, y por la tarde, como todos los años en el aniversario, las peñas sanfermineras abandonaron la plaza de toros al final de la corrida con las pancartas plegadas y visitaron de nuevo el lugar donde cayó muerto el joven pamplonés.