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Con momentos de buen juego, pero con un hombre de más desde los 30 minutos del primer tiempo, el seleccionado argentino superó ayer al alemán por 3 a 1. Se trató de un choque amistoso de cara a los encuentros por las eliminatorias sudamericanas que Argentina afrontará a partir de septiembre (doble fecha ante Paraguay en Mendoza, y con Perú en Lima).
Los goles del combinado albiceleste los marcaron Sami Khedira en contra (45m. PT), Lionel Messi (6m. ST, antes falló un penal) y Angel Di María (27m. ST) para el equipo que conduce Alejandro Sabella. Descontó para Alemania Benedikt Howedes (35m. ST) que terminó con diez jugadores por la expulsión de Ron-Robert Zieler.
En un choque donde se enfrentaron dos verdaderas potencias del fútbol internacional, dos campeones del mundo, el rótulo de “amistoso” quedaba, al menos en la previa, de lado. Sin embargo, la expulsión del portero alemán acentuó el carácter del partido. Argentina empezó a tener varios pasajes de buen juego a la vez que empezaba a gestarse la goleada.
El seleccionado de Alejandro Sabella entregó el detalle saliente del pase entre líneas (con el complemento de la movilidad de los delanteros y los volantes por afuera); una tarea apagada de Messi, la intención de ser seguro en la salida con Fernando Gago bajando a buscarla y un problema defensivo.
Si Marcos Rojo se mostró sólido por su punta, no pasó lo mismo con Pablo Zabaleta por la derecha. Lo asistieron dos excusas: una poca colaboración de los volantes por su zona, y la vertiginosa insistencia del lateral izquierdo de Alemania, Marcel Schmelzer, que junto con Mesut Ozil generó los mejores momentos.
Por ese costado Alemania se acercó dos o tres veces con cierto riesgo, la más clara a los 11m., cuando Klose esperó la llegada de Ozil y Romero detuvo el remate del hombre del Real Madrid.
Once contra diez, Argentina se plantó en el campo ajeno. Y a cambio del desperdicio de Messi en el penal fue Khedira el que le hizo el gol albiceleste. El volante alemán pifió un rechace tras un corner de Angel Di María (compañeros en el Real Madrid) y batió su propia valla, a segundos del descanso, un golpe deci sivo.
Para el segundo tiempo, Sabella sacó a Sosa y puso al Kun Sergio Agero, cuya suplencia se hace cada vez más incomprensible. En su primera intervención seria, el ex-
Independiente participó de una hermosa sucesión de toques que terminó en el gol de Messi. La inició Di María, Agero abrió hacia la izquierda para Higuaín y el Pipita la cedió, mansa, para el remate seco del crack argenti no.
De allí al final quedaron algunos otros pasajes destacados: el golazo de Di María, algunos pincelazos brillantes de Messi, el descuento de Alemania. En definitiva, un buen ensayo, un paso adelante.