El partido era prometedor en la previa, pero a la hora del juego no cumplió con las expectativas. Racing y Lanús empataron en un tanto por bando, en el marco de un duelo en el que abusaron del pelotazo. El granate no supo definirlo cuando se encontró en ventaja y la academia no logró aprovechar el envión anímico para llevarse todo cuando consiguió el empate.
Los primeros veinte minutos fueron de Lanús, que manejó bien la pelota a partir del buen trato de Matías Fritzler, Guido Pizarro y Víctor Ayala en el mediocampo; con Castillejos como pivote y Oscar Benítez en la delantera para generar peligro.
Benítez fue un factor sumamente desequilibrante para el grana en la primera parte, sobre todo ganándole sobre la banda derecha a Claudio Corvalán.
Sin embargo, Lanús no tuvo profundidad ante un Racing que no demostró nada en toda la etapa inicial. Mauro Camoranesi y Ricardo Centurión, quienes debían enhebrar juego en el equipo, no gravitaron y a los delanteros no les llegaba la pelota.
La jugada más relevante llegó sobre el final y fue la del penal que le dio el gol al granate. La incidencia se originó después de un desborde de Benítez por derecha: el delantero remató al arco, Olivera dio rebote y le quedó a Castillejos, que sufrió una torpe infracción de Leonardo Migliónico en el área. El tiro desde los doce pasos fue convertido en gol por Castillejos.
En el segundo tiempo Racing mejoró. En el mediocampo Agustín Pelletieri se adueñó de la pelota y se asoció mejor con Camoranesi para la distribución; el ingresado Fariña le brindó mayor frescura al equipo y Hauche comenzó a generar peligro.
El gol llegó después de una muy buena jugada colectiva, una triangulación entre Camoranesi, Centurión y Hauche, quien definió muy bien ante la salida del arquero.
El empate de la academia, lejos de abrir el juego, lo cerró. Ambos equipos se fueron conformando con el empate y no arriesgaron.