inicia sesión o regístrate.
Uno de los hijos del empresario argentino Ignacio Viale fue agredido en la fiesta de La Fontana del año pasado. La fiesta de La Fontana, uno de los eventos más grandes del verano de Punta del Este, terminó mal, con disturbios y saqueos. A pesar de la resistencia de varios vecinos “famosos” como el empresario Ignacio Viale, Alan Faena y Marcelo Tinelli, la polémica celebración se llevó a cabo anteayer con la presencia de unos 4.000 jóvenes, con los condimentos de música y mucho alcohol hasta el amanecer. Aproximadamente a la una de la madrugada, varios móviles controlaban el intenso tráfico de vehículos que a esa hora comenzaba a llegar al inmenso predio, con un público en su mayoría de entre 18 y 23 años. Grande porque se estima que asistieron más de 4.000 personas y polémica porque sobre sus organizadores pesa una demanda civil y penal realizada por el empresario argentino Ignacio Viale -padre de los actores Juana y Nacho Viale y exmarido de la hija de Mirtha Legrand- a raíz de una agresión que sufrió uno de sus hijos en la misma fiesta, en 2012. Si bien hubo un fuerte dispositivo de seguridad, con cerca de 100 personas, el fervor y el alcohol ganaron la pulseada. El peor momento fue cuando se dio la orden de “cortar” el suministro de alcohol debido a que la situación se estaba complicando, explicaron los organizadores. Pero por entonces, lejos de calmar los ánimos, la decisión empeoró el clima. Rodeando la barra, decenas de jóvenes comenzaron a entonar cánticos contra quienes atendían. La apuesta crecía poco a poco, hasta que en un momento comenzaron a golpear a patadas la estructura de madera para intentar tirarla abajo. Por último, saltaron la barra para sacar lo que quedaba de alcohol. “Están tirando botellas y piedras al aire y si no salimos de acá nos van a romper la cabeza. No me voy a hacer partir la cabeza”, dijo uno de los guardias mientras se retiraba del lugar. Los empleados de la barra también habían desalojado la zona por miedo a ser agredidos. Recién cuando no quedaron más cajas con bebidas por robar, la situación volvió a la calma.
Preocupa la ola de inseguridad
La ola de robos que afecta a Punta del Este ha llevado a intensificar los operativos de las fuerzas de seguridad. La Policía uruguaya busca a delincuentes que abandonaron un automóvil en Punta del Este, en cuyo interior hallaron capuchas y herramientas, así como una serie de mapas con descripciones de chacras de la zona.
Los delincuentes eludieron un control policial y escaparon en un Peugeot, que abandonaron en la zona de San Rafael, a pocos kilómetros de La Barra, barrio donde se encuentra la mansión del empresario italiano Lapo Elkann, que el pasado domingo sufrió uno de los mayores robos en la historia de la ciudad balnearia.
Los investigadores creen que el hallazgo puede estar vinculado a una banda de delincuentes que opera en Punta del Este.