inicia sesión o regístrate.
Un lobo marino aprovechó la distracción de un pescador que estaba mostrando su “presa” ante las cámaras, para sustraerle con gran rapidez el dorado al orgulloso pescador norteamericano. La pintoresca escena ocurrió en México. Lo cierto es que el lobo marino se quedó con el almuerzo gracias a la rapidez con la que actuó, dejando al hambre asombrado ante tamaña audacia. A los leones marinos les gusta jugar con los peces antes de comer, pero éste prefirió hacer las cosas más rápido y llevarselo directamente para saciar su apetito.