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Prefirió dejar el silencio. El exsecretario de Transporte Juan Pablo Schiavi salió ayer a dar explicaciones de por qué ocurrió la tragedia de la estación de Once en la que murieron 51 personas y otras 700 quedaron heridas. Las declaraciones no fueron ante la Justicia sino durante una entrevista realizada por una radio porteña. Schiavi aseguró que los frenos del tren que chocó funcionaban, afirmó “compartir el dolor de los familiares de las víctimas” y manifestó que lo “desvela conocer las causas del accidente”.
El exfuncionario apuntó al maquinista de la formación, Marcos Córdoba, al asegurar que según las pericias ordenadas por el juez Claudio Bonadio los frenos estaban operativos, incluso el freno de guarda, los compresores estaban operativos y permitían frenar adecuadamente pese a que faltaban dos.
Importaba el horario
Schiavi, tras seis de meses de silencio público, sostuvo que el Gobierno no controlaba el destino que TBA daba al subsidio estatal que recibía sino que los trenes salieran en horario, y manifestó que ningún informe de la Auditoría General de la Nación (AGN) recomendó la rescisión del contrato con la concesionaria del Sarmiento.
El exsecretario de Transporte negó, por otra parte, formar parte de una cadena de la felicidad con concesionarios y trabajadores, tal como lo aseguró el fiscal Federico Delgado y pidió: “Que me vengan a dar vuelta como una media, mis pibes estudian en la universidad pública, van en tren a la facultad, mi mujer es profesional, a mí me cuesta conseguir trabajo”. El exfuncionario afirmó que muchas veces viajó en el Sarmiento porque “tenía amigos en la zona de Haedo”, y sostuvo que “es un ferrocarril con un problema crónico, porque no hay otra manera de venir (a la Capital) de esa región que no sea en tren”.
“No teníamos capacidad de rescisión, la AGN no planteó la rescisión del contrato”, destacó y, por otra parte, afirmó: “Yo me hago cargo de mí, no de (su antecesor en el cargo Ricardo) Jaime”.
En respuesta a estas declaraciones, el presidente de la AGN, Leandro Despouy, pidió a Schiavi “que lea un informe de ese organismo de 2008 que describía el mal estado técnico de los trenes y advertía que los frenos de las formaciones del ramal Sarmiento no funcionaban”.
Este adelanto de Schiavi da un escenario de lo que se viene: el juicio oral por la tragedia de Once. Allí pasarán exfuncionarios y empresarios encargados del servicio de trenes, quienes ya tienen la mira sobre el conductor de la máquina.