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De película. Un empleado administrativo de la estación de servicio YPF, ubicada en la intersección de las calles Paraguay y Bélgica, fue sorprendido por dos motochorros que le arrebataron un bolso con 70 mil pesos cuando se dirigía a depositar el dinero en una sucursal bancaria ubicada a pocos metros de las oficinas de la firma.
Lo insólito fue que los ladrones no pudieron encender la motocicleta en la que pensaban escapar, por lo que la dejaron tirada y comenzaron a correr.
Dos empleados del servicio de correo OCA y varios testigos, que presenciaron la entradera, comenzaron a perseguirlos mientras alertaban al 911.
El hecho ocurrió ayer a la mañana y conmovió a los transeúntes que presenciaron el atraco que pareció una película de acción.
Rolando Frágola (40), un empleado que se desempeña en el área de tesorería de la estación de servicio YPF, es quien realiza el mismo camino todos los días hacia el banco para depositar la recaudación del día.
Ayer, como lo hace habitualmente, guardó 70.000 pesos en un maletín negro con correa larga, que fue lo recaudado durante toda la jornada, y salió a depositarlo en una sucursal del banco Macro que se encuentra ubicada a escasos metros de las oficinas.
Durante su caminata una motocicleta Motomel 200 cilindradas lo estaba esperando con dos sujetos a bordo, quienes, sin mediar palabras, le arrebataron el bolso rompiendo la correa que sujetaba el dinero a su cuerpo.
Según testigos, la víctima quedó perpleja, mientras los asaltantes, que fueron identificados como Julio Ruiz (36) y Emanuel Usenas (18), domiciliados en la provincia de Tucumán, intentaban darle arranque a la motocicleta. Pero como no pudieron, decidieron dejarla tirada y huir corriendo. Fue ahí que todos reaccionaron y comenzaron a perseguirlos.
Un testigo que dialogó con El Tribuno expresó: “Los motochorros se fueron corriendo y dos empleados de OCA salieron a perseguirlos. En ese momento, entre los gritos y nervios, un batallón de personas que se encontraban en el lugar se unieron para agarrar a los ladrones y los atraparon en Independencia y Chile”.
En ese momento fue alertado el 911 y alrededor de 12 efectivos de la motorizada comenzaron una persecución que culminó en las calles mencionadas.
Lo tenían marcado
Una de las primeras hipótesis que manejan los brigadistas a cargo de la investigación es que la víctima fue marcada por los asaltantes con anterioridad y que ya conocían los movimientos que realizaba.
Trascendió que un testigo ocasional que se encontraba parado frente a la estación de servicio observó a los malvivientes a bordo del rodado en una actitud muy sospechosa y no dudó en fotografiarlos.
La imagen fue entregada a los efectivos del 911 y quien la tomó expresó que le llamó la atención el lugar en el que estaban ubicados y que le dio la sensación de que estaban esperando a alguien.
Finalmente, los motochorros fueron trasladados a la Alcaidía Judicial mientras continúa la investigación del hecho.