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Distintas fuentes consultadas por El Tribuno aseguraron ayer que no hay en la provincia antecedentes cercanos de una sucesión de homicidios como la registrada entre el lunes 13 y el lunes 21 de este mes, período en el que hubo siete personas asesinadas en la misma cantidad de días en el territorio salteño.
El primer crimen el lunes 13 en la calle Gurruchaga 584 del macrocentro capitalino. Allí una anciana, Mercedes Tapia, de 72 años, fue hallada sin vida con una tijera incrustada en su cuello. Por el caso hay dos detenidos, y uno de ellos confesó la autoría del homicidio.
Al día siguiente Daniel Figueroa, un joven de 17 años del barrio Unión, fue ejecutado de un disparo en el pecho. En la causa hay cinco detenidos.
El jueves 16 por la mañana fue encontrado sin vida en su casa de Cerrillos el peón rural Julio Lazarte, de 37 años . La autopsia determinó que al hombre lo mataron a golpes.
El sábado 18 el bagayero Gerardo Gabriel Tercero, de 20 años, fue asesinado durante un enfrentamiento con gendarmes en un puesto de Gendarmería entre Orán y Aguas Blancas. El hombre recibió un disparo de un arma calibre 9 mm.
Ese mismo día en Colonia Santa Rosa se produjo el crimen de Wilson Montenegro, de 21 años, quien recibió dos machetazos a la altura del corazón y el pulmón. Por el crimen hay tres personas detenidas.
El hecho más impactante de todos, fue el homicidio de la pequeña Judith Palma, de 9 años quien fue hallada violada y degollada el domingo en Joaquín V. González. Hasta ayer los detenidos por este homicidio eran seis.
El último caso fue el asesinato de Raúl Flores en la casa de su madre, luego de la fiesta su cumpleaños número 72. Los detenidos por el crimen son los dos hijos y tres sobrinos del hombre.