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En épocas de campaña todo se intenta y todo parece valer. Pero del ridículo no se vuelve. Es que el miércoles en Twitter parecía haber explotado el amor por el gobernador Urtubey.
Con mensajes alentadores, cariñosos y hasta algún que otro piropo, Juan Manuel Urtubey estaba en boca de muchos a través de esta red social. ¿Qué tienen de malo o extraño las demostraciones de cariño hacia el mandatario salteño? Absolutamente nada.
Sin embargo, llamó la atención de el periodista de Somos Salta, Daniel Gutiérrez, cuando contó que comenzó a ser “seguido” por usuarios que no habían introducido ningún comentario en Twitter y que “sorpresivamente todos tuiteaban cosas bonitas sobre Urtubey”. Después, como ejemplo, reprodujo un tuit de María Gómez que le preguntaba al Gobernador si no estaba mareado porque “deberías estarlo. Desde que te vi que no paras de dar vuelta en mi cabeza”, o uno de Ana Cuartero que la agradecía a “Juan” y lo anoticiaba de que su familia lo amaba.
También señaló un comentario de Agustina Filisti que le agradecía un saludo y le preguntaba “puede que no seas perfecto... pero sabes una cosa, tus defectos son encantadores. Exitos”, u otro de Fabiana Moriso que también le agradecía pero por un tendido eléctrico de su barrio.
Pero el aporte más importante lo realizó Juan Pablo Tolaba cuando mostró que los usuarios que mencionan y promocionan al gobernador tienen idénticas características: las cuentas fueron creadas el mismo día, tienen prácticamente la misma cantidad de comentarios y la biografía es exactamente igual, solo que cambia el nombre y el color favorito.
Es un secreto a voces que en el Grand Bourg muchos usan las redes sociales no por convicción sino por “obligación”. Lo grave sería que estos falsos perfiles sean remunerados desde las arcas del Estado.