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Un niño de dos años y su madre, una joven de 19, sufrieron quemaduras, tras incendiarse parte de la precaria y humilde vivienda prefabricada con material cocido y techo de chapa donde residen. El hecho ocurrió el jueves por la noche, en el barrio Palmeritas, en la zona oeste de la capital salteña. Como consecuencia, el pequeño se encuentra internado en gravísimo estado. Según consta en el informe policial, la joven se había ausentado de su domicilio, situado en la etapa 3, manzana 110, lote 17, para acompañar a un familiar, una menor de 13 años a clases de folklore, a dos cuadras del inmueble. Los residentes de la zona manifestaron que aparentemente el menor se encontraba solo en el interior del domicilio durmiendo. Al retornar, la joven observó que salían llamas de la vivienda, por lo que entró corriendo y cuando ingresó a la habitación observó que el colchón donde dormía el menor se encontraba incendiado. El chico, ya con quemaduras, se hallaban debajo de la cama, por lo cual se metió para rescatarlo y pidió auxilio a los vecinos.
El foco ígneo se habría iniciado aparentemente, a causa de una vela encendida sobre un velador de plástico, ubicado al lado de la cama, ya que la casa carece de luz eléctrica.
Un vecino trasladó a ambos en su automóvil hacia el centro de salud del barrio Palermo II, pero como allí no encontraron médico, ni ambulancia, se dirigieron al hospital Materno Infantil. Allí el niño fue asistido por el doctor Aleman, quien le diagnosticó “quemaduras tipo A y B en el 70 por ciento del cuerpo”, por lo que quedó internado en la Unidad de Terapia Intensiva. A la progenitora, quien fue asistida por la doctora Flores de la guardia de adultos, se le diagnosticó “quemaduras tipo A en manos”. Dos móviles de Bomberos lograron sofocar el foco ígneo a las 23.10. Se registraron daños parciales.