PUBLICIDAD

¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

Su sesión ha expirado

Iniciar sesión
18°
16 de Septiembre,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Cada vez menos arboles

Lunes, 30 de junio de 2014 01:08
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Aunque el tema que voy a abordar merece una investigación profunda y con mas detalles, lo describo aun, con la esperanza de que alguien interesado en la ecología y el medio Ambiental ahora, respalde estas indicaciones.

Las barbaridades que hemos hecho y seguimos haciendo, por ignorancia o falta fe respeto de las hermosas arboledas de nuestro querido Parque San Martín no cesan. Valga señalar que ya han sido varias y recientes. La depredación comenzó algunos años atrás, cuando a un desubicado se le ocurrió, talar arboleda gigantes, lleno de añejos eucaliptus, para construir los departamentos en largos monoblocks al inicio de calle San Martín, cerca del cementerio de la Santa Cruz y llegando hasta el mismo, hace unas décadas. Siguieron luego la autorización de instalar varios restaurantes en cada esquina de las plazas del parque y más tarde se expropio una enorme franja donde se construyó el famoso Hogar Escuela, que fuera una necesidad pero se coloco donde venga. Lo mismo con el terreno en torno a donde fuera el Museo de Ciencias Naturales, cuando el Sporting Club instaló sus canchas de tenis, allá por los años cuarenta y después la bendita Terminal de Omnibus. Más tarde siguieron la instalación de las ferias frente al monumento al General San Martín. Un experimentado arquitecto y ecologista ha señalado que existe la idea de seguir recortando árboles y poniendo toda clase de boliches. La última fue que se instalaron las casillas de cemento sobre la calle Lavalle en el parque. No niego que hay necesidad de seguir dando sitios a los pequeños comerciantes. Pero comparo eso con lo que se ve en París. Ahí las ferias literarias funcionan sobre las avenidas al lado del Río Sena, donde aparecen largas hileras de libros muy valiosos y añejos, sobre los paredones que dan al Río. No venden menos y no contaminan ni perjudican a nadie.

El parque Independencia de Tucumán, fundado en el año 1902 sigue intacto y hermoso y es un orgullo de una ciudad que desgraciadamente no muestra igual interés en mantener espacios libres cercados y limpios en pleno centro. Pero en el Parque Independencia nadie construyo nada. La ciudad de Mendoza es otro ejemplo, en sus calles y avenidas hay arboles muy añejos y bien cuidados al margen, regados por acequias que recorren la ciudad. Ahí el parque está lleno de especies extranjeras valiosisimas.

Espero alguien reflexione y tome medidas que limiten estas barbaridades.

Guillermo Perez Zapata, Salta

 

Temas de la nota

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD