El centro de salud 15 de barrio Castañares tiene desde principio de año un servicio de atención especializada para personas del colectivo trans.
Cuatro profesionales atienden en un consultorio específico las diferentes realidades de un colectivo que aún tiene complicada su aceptación social.
Concretamente, el centro de salud atiende las demandas de hormonas, la atención psicológica y todos los controles bioquímicos que deben tener. Se puede decir, entonces, que se trata del primer centro de salud que está en condiciones de atender a los trans en la provincia.
"La idea del consultorio surgió porque muchas personas trans que llegaban al centro de salud manifestaban que para ellas no había respuestas con respecto a consultas, análisis y hormonas. Supimos que en la Fundación CASI, que atiende en la calle Gral. Güemes 1077, está la doctora María Elena Salvo, que atiende a las personas trans, conoce lo que padecen y luego las deriva al centro de salud Nº15", dijo la doctora Amalia Mendilaharzu días atrás.
El Tribuno llegó hasta Castañares para consultarle a la doctora Mendilaharzu los detalles de esta nueva iniciativa sanitaria.
"Como no había respuesta a las personas del colectivo trans, decidimos trabajar junto a la doctora María Elena Salvo. de El Observatorio, que dentro de su Proyecto CAIS, trabaja con la diversidad", dijo Mendilaharzu.
"Es por eso que decidimos abrir un consultorio para que las personas trans tuviera lo que se necesita en sus diferentes etapas del proceso de hormonización y que a la vez estén supervisado por un profesional", amplió.
La primera inquietud salió sobre si el consultorio ayudaba a las personas en su transformación. La profesional advirtió: "Esto también sirve para aquellos chicos y chicas que aún no saben qué hacer. Esto es para que vengan y con la psicóloga, la asistente social y los médicos le damos una orientación integral sobre el tema. Les advertimos sobre las diversas problemáticas que pueden originar un procesos de hormonización", dijo.
Algunos ya comenzaron de manera autónoma ese proceso que puede llevar a múltiples complicaciones mentales y físicas. Este consultorio atiende esa realidad y trata de alguna manera de regularizar, de forma integral, la salud de las personas de ese colectivo.
El centro de salud cuenta con médicos, bioquímicos, psicólogos, laboratorios de análisis clínicos, kinesiología y asistentes sociales.
Consejo
La recomendación del cuerpo de profesionales es que los interesados se lleguen para realizar cualquier tipo de consultas.
En la medida que vayan registrándose dentro de la salud pública, habrá estadísticas más abarcativas, para lo cual se harán necesarias las discusiones sobre las políticas que se necesitan. "Es una manera de institucionalizarse", dijo con buen tino la doctora.
Un espacio para la salud y contención
Las pacientes agradecen con trabajo voluntario en el centro de salud, los fines de semana. “Las chicas se empoderan tanto del servicio que voluntariamente vienen a prestar algún servicio en la salita como forma de agradecimiento. Limpian la sala, cortan el pasto o arreglan las cosas cotidianas que se van rompiendo. Hay muy buena onda y están muy agradecidas”, dijo una de las enfermeras que está de guardia los fines de semana.
La doctora confirmó este dato y dijo que sus pacientes llegan los fines de semana para prestar un trabajo voluntario.
“La consejería que establecimos le da una contención que nuestras pacientes agradecen. Debemos recordar que si bien hubo muchos progresos en cuanto al respeto por la diversidad, también debemos ser conscientes de que para ellos y ellas resulta muy difícil la inserción en la sociedad salteña actual”, dijo, y recordó que en la consejería también van mujeres que se están transformando en hombres.
Por eso, advirtió sobre la enorme complejidad de la problemática que atienden y sobre cómo se formó ese espacio de contención humana.
En cuanto al Observatorio para la Promoción de Derechos de la Diversidad, es un espacio de intervención social que tiene como objetivo ampliar los horizontes culturales en Salta y la región con el fin de sensibilizar a la comunidad, a organismos públicos y privados y a medios de comunicación en el respeto por los derechos y estilos de vida del conjunto de colectivos y actores sociales que habitan la provincia.
El Observatorio lleva adelante acciones de abordaje integral en promoción de acceso a derecho y de visibilización de las situaciones de discriminación y estigmatización de identidades y prácticas a través de diferentes proyectos. En la articulación con otros espacios, como el centro de salud 15, promueve el autorreconocimiento de colectivos diversos como sujetos de derechos.
El centro de salud 15 de barrio Castañares tiene desde principio de año un servicio de atención especializada para personas del colectivo trans.
Cuatro profesionales atienden en un consultorio específico las diferentes realidades de un colectivo que aún tiene complicada su aceptación social.
Concretamente, el centro de salud atiende las demandas de hormonas, la atención psicológica y todos los controles bioquímicos que deben tener. Se puede decir, entonces, que se trata del primer centro de salud que está en condiciones de atender a los trans en la provincia.
"La idea del consultorio surgió porque muchas personas trans que llegaban al centro de salud manifestaban que para ellas no había respuestas con respecto a consultas, análisis y hormonas. Supimos que en la Fundación CASI, que atiende en la calle Gral. Güemes 1077, está la doctora María Elena Salvo, que atiende a las personas trans, conoce lo que padecen y luego las deriva al centro de salud Nº15", dijo la doctora Amalia Mendilaharzu días atrás.
El Tribuno llegó hasta Castañares para consultarle a la doctora Mendilaharzu los detalles de esta nueva iniciativa sanitaria.
"Como no había respuesta a las personas del colectivo trans, decidimos trabajar junto a la doctora María Elena Salvo. de El Observatorio, que dentro de su Proyecto CAIS, trabaja con la diversidad", dijo Mendilaharzu.
"Es por eso que decidimos abrir un consultorio para que las personas trans tuviera lo que se necesita en sus diferentes etapas del proceso de hormonización y que a la vez estén supervisado por un profesional", amplió.
La primera inquietud salió sobre si el consultorio ayudaba a las personas en su transformación. La profesional advirtió: "Esto también sirve para aquellos chicos y chicas que aún no saben qué hacer. Esto es para que vengan y con la psicóloga, la asistente social y los médicos le damos una orientación integral sobre el tema. Les advertimos sobre las diversas problemáticas que pueden originar un procesos de hormonización", dijo.
Algunos ya comenzaron de manera autónoma ese proceso que puede llevar a múltiples complicaciones mentales y físicas. Este consultorio atiende esa realidad y trata de alguna manera de regularizar, de forma integral, la salud de las personas de ese colectivo.
El centro de salud cuenta con médicos, bioquímicos, psicólogos, laboratorios de análisis clínicos, kinesiología y asistentes sociales.
Consejo
La recomendación del cuerpo de profesionales es que los interesados se lleguen para realizar cualquier tipo de consultas.
En la medida que vayan registrándose dentro de la salud pública, habrá estadísticas más abarcativas, para lo cual se harán necesarias las discusiones sobre las políticas que se necesitan. "Es una manera de institucionalizarse", dijo con buen tino la doctora.
Un espacio para la salud y contención
Las pacientes agradecen con trabajo voluntario en el centro de salud, los fines de semana. “Las chicas se empoderan tanto del servicio que voluntariamente vienen a prestar algún servicio en la salita como forma de agradecimiento. Limpian la sala, cortan el pasto o arreglan las cosas cotidianas que se van rompiendo. Hay muy buena onda y están muy agradecidas”, dijo una de las enfermeras que está de guardia los fines de semana.
La doctora confirmó este dato y dijo que sus pacientes llegan los fines de semana para prestar un trabajo voluntario.
“La consejería que establecimos le da una contención que nuestras pacientes agradecen. Debemos recordar que si bien hubo muchos progresos en cuanto al respeto por la diversidad, también debemos ser conscientes de que para ellos y ellas resulta muy difícil la inserción en la sociedad salteña actual”, dijo, y recordó que en la consejería también van mujeres que se están transformando en hombres.
Por eso, advirtió sobre la enorme complejidad de la problemática que atienden y sobre cómo se formó ese espacio de contención humana.
En cuanto al Observatorio para la Promoción de Derechos de la Diversidad, es un espacio de intervención social que tiene como objetivo ampliar los horizontes culturales en Salta y la región con el fin de sensibilizar a la comunidad, a organismos públicos y privados y a medios de comunicación en el respeto por los derechos y estilos de vida del conjunto de colectivos y actores sociales que habitan la provincia.
El Observatorio lleva adelante acciones de abordaje integral en promoción de acceso a derecho y de visibilización de las situaciones de discriminación y estigmatización de identidades y prácticas a través de diferentes proyectos. En la articulación con otros espacios, como el centro de salud 15, promueve el autorreconocimiento de colectivos diversos como sujetos de derechos.