Luego de que se conociera que a nivel nacional será obligación que los chicos de hasta diez años viajen en sillitas en el asiento trasero del auto, desde la Municipalidad de Salta difundieron que en Salta no se aplicará esta exigencia.
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Luego de que se conociera que a nivel nacional será obligación que los chicos de hasta diez años viajen en sillitas en el asiento trasero del auto, desde la Municipalidad de Salta difundieron que en Salta no se aplicará esta exigencia.
Cuando muchas familias tenían todo listo para salir de vacaciones, la modificación al artículo 40 de la ley nacional de tránsito impuso el requisito de tener sillas para los niños más grandes y sorprendió a muchos.
Por comodidad o para reducir los gastos, muchos prefieren viajar en sus autos particulares. Esto implica cuidar todos los aspectos mecánicos y la seguridad de cada uno de los pasajeros.
Pero, ¿cuál es el alcance real de esta medida? ¿Se implementará en Salta? De ser así, ¿cuál será la multa?
En diálogo con El Tribuno, Juan Carlos Garrido, subsecretario de Tránsito municipal de la capital aseguró que esta norma, por el momento, no se aplicará en Salta.
El funcionario dijo que cada provincia y municipio debe resolver si adhiere o no a la modificación de la normativa nacional. "En el caso de la ciudad de Salta, son los miembros del Concejo Deliberante los que deben resolver si esta norma se aplicará, además de regularla porque hay varios puntos flojos", apuntó.
La Ley Nacional de Tránsito 24.449 explicitaba en el artículo 40 que los menores de 10 deben viajar en el asiento trasero del auto. La modificación actual estipula el "uso obligatorio" del sistema de retención infantil o butacas para niños hasta los diez años.
Garrido cuestionó la tarea de los legisladores nacionales por no pensar en cómo harán aquellas familias que tiene tres niños menores de 10, no solo para comprar las sillas sino para hacerlas caber en el auto.
"La provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma ya adhirieron a la norma. Pero, creo que se debe tener en cuenta que los ingresos en Salta no son los mismos que en esos lugares", expresó el funcionario.
Garrido agregó que en Salta una familia tipo, si los dos padres tienen trabajo, con suerte llega a un ingreso de 26 mil pesos. Las sillas cuestan entre 3 y 11 mil pesos. "¿Cómo van a hacer para comprar dos butacas?", preguntó.
Otros de los puntos sobre los que el funcionario puso la lupa, es en que la norma no detalla la altura y peso que debe tener el niño. Solo se advierte que deben ser menores de 10 años. "Eso, una vez más queda en las manos de las provincias y los municipios para ver qué se hace", agregó.
Transporte público y escolar
La modificación del artículo 40 de la norma nacional tampoco aclara cómo se aplicará esta medida en colectivos, taxis, remises y transportes escolares.
En Tránsito remarcan que los transportes escolares no van a poder afrontar una inversión de este tipo, más si se tiene en cuenta que la mayoría realiza el traslado de niños de las salitas de 4 y 5 años.
El funcionario aseguró que serán complicadas algunas de las decisiones que deberán tomar los agentes de tránsito si se pone en práctica esta norma en Salta.
"Si un pasajero con un niño toma un remise o un taxi, y este no tiene la silla, los agentes se verán en la obligación de hacer bajar la pasajero del auto y que busque otro. Esto no solo perjudicará al trabajador sino que generará malestar entre el ciudadano y el agente", agregó.
Garrido destacó, además, que la aplicación de la normativa en el transporte público de pasajeros será otro tema a analizar cuando comiencen las clases.
Temor a las multas
Por la no adhesión de la ciudad de Salta a la norma, por el momento no habrá multas. Lo mismo ocurre en el resto del país, a excepción de la provincia de Buenos Aires y Capital.
En cuanto a los países limítrofes, el subsecretario de Tránsito, Juan Carlos Garrido, destacó que, por lo menos en Chile, sí se reclama el uso de las butacas para niños de hasta 9 años.
Los que no cumplen con la obligación, pueden enfrentarse a una multa de entre 67.700 y 135.500 pesos chilenos, aproximadamente y la suspensión de licencia entre 5 y 45 días.
En Chile la normativa fue reglamentada el 16 de marzo 2016. Se estipuló que los niños menores de 12 años deben ir siempre en el asiento trasero del vehículo, utilizando el cinturón de seguridad o sistema de retención. En marzo 2017 se especificó que el uso del sistema de retención infantil debe usarse hasta cumplir 9 años o hasta alcanzar los 135 centímetros y 33 kilos.
Creció la demanda de butacas para niños
Los clientes eligen las opciones más económicas que ofrece el mercado.
Tras la difusión de la noticia de que serían obligatorias las sillas para chicos de hasta 10 años en el auto, el temor a una multa hizo que muchos salteños salieran a comprar las butacas y los denominados booster elevador.
En un recorrido por el centro, El Tribuno confirmó que en algunos comercios las butacas se agotaron, lo que obligó a realizar nuevos pedidos que podría llegar recién en 15 días.
En un conocido local comercial ubicado frente a una de las esquinas de la plaza 9 de Julio, el gerente de salón destacó que las ventas fueron masivas, tanto de las sillas como de los booster.
Los precios de los últimos en este local rondaban los 700 pesos, mientras que las butacas, de acuerdo al peso de los pequeños, tenían valores que van de los $1.900 a los 6.990 pesos.
Hasta ayer, en este local solo quedaban para vender seis 6 butacas.
Una situación similar se presentó en un negocio de artículos para el hogar donde destacaron que no había butacas disponibles. En muchos casos, los clientes realizan las compras en la página web de la casa comercial y la sucursal en Salta, solo se encarga de entregarla.
Igualmente, uno de los vendedores del local destacó que los booster, que tenían un costo de 490 pesos, ya se agotaron. No volverán a reponerse, por lo que solo tienen para ofrecer los de 999 pesos, aptos para menores de 10 años.
La situación es similar en otros dos locales comerciales, especializados en la venta de artículos para el hogar y para niños, donde ya se habían venido muchas unidades.
“Acá recién vamos a tener más butacas y booster en 15 o 20 días. La mayoría de los clientes compraron para evitar una posible multa, pero no acá sino en Chile”, explicó una de las vendedoras que mantuvo contacto con los clientes, preocupados durante los últimos días.
“Son muy pocos los que piensan en la seguridad real de los chicos. La mayoría se lleva el booster más económico, aún cuando no es para el peso del niño. Otros prefieren las butacas hasta los 20 kilos del niño, que no superan los 2.300 pesos”, relató Juan, vendedor de una casa de artículos para niños y juguetería.
“Tenemos un modelo que es útil desde que el niño es recién nacido hasta que pesa 48 kilos, pero cuesta 10 mil pesos”, agregó.
Lucía junto a su hermano son un caso testigo de lo que está generando la modificación de la Ley Nacional de Tránsito.
En unos pocos días esta familia viajará al sur del país, y por temor a sufrir alguna multa, resolvió comprar la butaca para uno de los pasajeros de esta travesía, que no supera los 4 años.
“Cuando vinimos, no tuvimos ningún problema pero en el regreso vamos a hacer un tramo del viaje por Chile y sabemos que están haciendo multas. Queremos evitar el mal rato”, expresó Lucía, mientras ayudaba a su hermano con la caja de la butaca.
La misma situación experimentarán los salteños que quieran viajar a Brasil con sus pequeños.
En este país vecino, la norma determina que todo niño menor de 7 años deberá viajar con su silla y todos los menores de 10 años deben viajar siempre en el asiento trasero. Los que tienen entre 7 y 10 años no necesitan sillitas.