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Reclama justicia por su hija asesinada hace un año

El 29 de abril de 2017, Camila Rodríguez fue ultimada de una puñalada, en Orán.
Domingo, 29 de abril de 2018 00:00
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El dolor por la violenta pérdida de su hija Camila sigue siendo un extensa herida en el corazón de Mónica Adriana Avallay. Hoy, a un año de esa muerte, ella reclama en todos los tonos de voz, justicia a la Justicia.

Camila Rodríguez desapareció de su casa, del barrio Caballito de Orán, el 25 de abril del año pasado. Tenía 15 años y estaba embarazada de seis meses. Su mamá junto a sus hermanos, vecinos y amigos comenzaron a buscarla. También la policía, luego de recibir la denuncia por su desaparición. El 29 de abril, un vecino de El Cañaveral, avisó a la policía que había un cuerpo a metros de la ruta nacional 50, en medio de los yuyales. Al día siguiente, la autopsia realizada por peritos del CIF confirmó que se trataba de Camila.

Doce meses después, Mónica Avallay, mamá de la víctima, recibió una notificación sobre la causa, pero sin abogado que la represente y sin entender demasiado los vericuetos ni el lenguaje judicial, lo único que sabe es que quiere que los responsables del crimen de su hija reciban el castigo previsto por la ley.

Tras el hallazgo del cuerpo de Camila, dos jóvenes y una adolescente menor de edad fueron detenidos: Cristian Gabriel Pizarro, Talía Isabel Ruiz, y la menor A.M.S.. Un cuarto acusado figura en la causa K.G.S. acusado de encubrimiento. Actualmente, solo Pizarro y Ruiz están detenidos en sede policial, mientras que la menor recibió prisión domiciliaria.

"En realidad fueron varios los implicados, pero muchos están callando. Yo los puedo nombrar a todos. Yo los vi esa tarde golpeando las manos, drogándose y chupando en la esquina. Y ese mismo día hicieron gritar a mi hija; no fue el martes como ellos dicen ahora", remarcó Mónica.

La mujer también se quejó por la prisión domiciliaria que la Justicia le otorgó a la menor, que es su sobrina. La chica se trasladó a Pichanal, a 22 kilómetros de Orán, donde tiene familia.

"Tiene prisión domiciliaria pero se la ve libremente en la calle de ese pueblo; el juez dice que tiene permiso porque es menor y porque tiene un hijo criando. Hubiera pensado en eso antes de hacer lo que hizo, porque todos dicen que es ella la que le clavó el cuchillo a mi hija. Y está libre en Pichanal. Ahora ella tiene 17 años. Esto yo le reclamé al juez", afirmó la madre de Camila.

Mónica dijo sentirse "traicionada" porque su sobrina "se vino a mi casa porque su mamá, mi hermana, era adicta y andaba en la calle; pero ella vino y me arruinó todo".

"Mi hermana, mi sobrina, que son mi familia, sabían lo que había sucedido y no me dijeron nada. Cuatro días pasaron hasta que encontró, otra persona, el cuerpo de mi hija", dijo entre sollozos.

La mujer dijo que intentó varias veces que la atendiera el juez de la causa o la fiscal, pero su solicitud no fue atendida.

"Para peor, el abogado que tenía me estafó. Me pidió plata para supuestamente apurar la causa, le pagué y ahora se fue a Formosa; ni siquiera figura como mi representante en el expediente", aseguró.

"Yo quiero justicia para mi hija porque ella no merecía esto y nosotros tampoco", concluyó.

 

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