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Algunas personas estuvieron más de 24 horas esperando afuera de la institución para lograr inscribir a sus hijos en el primer año de la escuela pública 5.003, José Manuel Estrada, de San José de Metán.
Ya se habían realizado las preinscripciones con anterioridad y se formaron largas filas. Muchos no pudieron acceder, pero días pasados la dirección informó que quedaban 43 vacantes y que el jueves se iba a realizar otra inscripción de manera presencial en el local escolar, de 8 a 12 horas.
Ocurrió algo llamativo en la localidad. Padres, familiares y amigos comenzaron a hacer una especie de vigilia, algunos desde las 7 de la mañana del miércoles. Hubo furor y mucho sacrificio ya que más de 43 personas con reposeras y abrigos pasaron la noche en las veredas del sector de la escuela, ubicada en la avenida Mitre, frente a la terminal de ómnibus de Metán.
Debido a las pocas vacantes los mismos padres se organizaron y repartieron números para evitar inconvenientes. Hubo algunas quejas por la modalidad y las horas de espera, pero otros dijeron que el esfuerzo valía la pena por la trayectoria y calidad educativa del colegio. La institución recordó que debían llevar la documentación completa de los que deseaban ingresar a primer año.
Natalia Paz era la primera en la fila y se colocó con una reposera y una campera, a las 7 de la mañana del miércoles, para inscribir a su hija, por lo que estuvo más de 24 horas para lograrlo.
"Mi marido va a quedarse de noche, nos vamos reemplazando. Mi hija quiere venir a este colegio con sus compañeros. Tenemos buenas referencias sobre la enseñanza y las exigencias, por eso estamos haciendo este esfuerzo", dijo la mujer a El Tribuno.
"Como solamente dijeron que había 43 vacantes nos organizamos entre los padres y se dieron números, justamente para que nadie vaya a meterse entre los que están haciendo esta larga espera con mucho sacrificio", destacó Paz.
El colegio de los robotistas
Por su parte, Gustavo Campos también hizo la fila y se quedó toda la noche para poder inscribir en la mañana del jueves pasado a su hijo en la destacada escuela de Comercio José Estrada, a la que concurren los premiados robotistas.
"Estamos desde esta mañana (del miércoles) y con mi señora nos vamos reemplazando. Yo me voy a quedar toda la noche para poder inscribir a mi hijo. Ya tenemos el número 21 y eso nos da tranquilidad. Hay muy buenas referencias de este colegio y mi hijo quiere venir acá porque es muy buena la educación, por eso está toda esta gente haciendo este sacrificio", indicó Campos.
"Nuestro objetivo es lograr inscribir a mi hijo Gustavo para que el año que viene pueda iniciar el primer año. Trajimos una reposera, esperamos que no haga mucho frío y que no llueva. Tenemos que aguantar, no nos queda otra, pero va a valer la pena porque es una buena institución educativa", dijo el vecino metanense.