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El sorteo del Mundial 2026 tuvo una apertura única en Washington con un despliegue artístico sin precedentes: Andrea Bocelli inauguró la gala con “Nessun Dorma”, seguido por Robbie Williams y Nicole Scherzinger con “Desire”, a los que se sumó Lauryn Hill y el cierre icónico de Village People con “YMCA”, en una ceremonia que combinó fútbol, espectáculo global y la presentación oficial de los grupos, incluido el de Argentina frente a Argelia, Austria y Jordania.
Bocelli y un giro pop con Robbie Williams
El tenor italiano Andrea Bocelli fue el encargado de abrir la gala en el Kennedy Center de Washington D. C., con una interpretación magistral de “Nessun Dorma”, acompañado por orquesta en vivo. El inicio solemne dio paso a un cambio absoluto de atmósfera cuando Robbie Williams y Nicole Scherzinger se adueñaron del escenario con “Desire”, el himno oficial del Mundial, elevando el ánimo de un auditorio colmado de figuras del deporte, dirigentes de FIFA e invitados internacionales.
Lauryn Hill, la sorpresa emotiva y un final retro inolvidable
Más avanzada la ceremonia, Lauryn Hill brilló con “Doo Wop (That Thing)” y sumó una cuota emotiva cuando sus hijos Zion y Joshua “YG” Marley se unieron sobre el escenario, convirtiendo el segmento en el más extenso y celebrado del evento. Tras la confirmación de los grupos —con Argentina en el Grupo J frente a Argelia, Austria y Jordania— el cierre quedó en manos de Village People, que con “YMCA” hicieron bailar a todo el Kennedy Center, incluido Donald Trump, quien se puso de pie para ovacionarlos.
La previa, el guiño político y el Premio de la Paz FIFA
Antes del sorteo, Kevin Hart y Heidi Klum marcaron el pulso inicial con humor y glamour, mientras que Gianni Infantino protagonizó uno de los momentos más comentados al otorgar el nuevo Premio de la Paz de la FIFA al presidente Donald Trump, en reconocimiento a “sus esfuerzos por la estabilidad global”. El mandatario lo calificó como “uno de los mayores honores” y recibió una ovación unánime en la sala.