"Hoy estamos inaugurando este importante gasoducto, con una inversión de más de $35 millones, que permite que más de 10.000 familias puedan tener gas y que los productores puedan mejorar la calidad de su producto y su competitividad". Esto anunciaba la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner el 1 de agosto de 2013, desde Coronel Moldes, para todo el país, a través de la TV Pública.
A casi tres años de aquel concurrido acto en el que acompañaron a la mandataria su ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, el gobernador Juan Manuel Urtubey y un importante marco de dirigentes y militantes del Frente para la Victoria, esas 10.000 familias de Coronel Moldes y La Viña todavía cocinan y se calefaccionan con garrafas, leña y carbón.
El gasoducto del Valle de Lerma sur, en realidad, costó más de $38 millones, aunque originariamente la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación había asignado para el proyecto $25 millones en noviembre de 2012.
Las obras, financiadas con recursos del Fondo Especial del Tabaco (FET), fueron adjudicadas a Mega SRL, una constructora que en los últimos años se posicionó entre las principales contratistas de la Secretaría de Obras Públicas de la Provincia y la Coordinación del Fondo de Reparación Histórica del Norte.
A casi tres años de aquel concurrido acto en el que acompañaron a la mandataria su ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, el gobernador Juan Manuel Urtubey y un importante marco de dirigentes y militantes del Frente para la Victoria, esas 10.000 familias de Coronel Moldes y La Viña todavía cocinan y se calefaccionan con garrafas, leña y carbón.
El gasoducto del Valle de Lerma sur, en realidad, costó más de $38 millones, aunque originariamente la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación había asignado para el proyecto $25 millones en noviembre de 2012.
Las obras, financiadas con recursos del Fondo Especial del Tabaco (FET), fueron adjudicadas a Mega SRL, una constructora que en los últimos años se posicionó entre las principales contratistas de la Secretaría de Obras Públicas de la Provincia y la Coordinación del Fondo de Reparación Histórica del Norte.
El gasoducto de 54 kilómetros, se inició en agosto de 2011 en Las Moras, una extensa finca de Chicoana que, curiosamente, tiene al dueño de la empresa Mega, Carlos Berruezo, como titular desde el 26 de junio de 2013.
Pocas semanas después de esa fecha la expresidenta anunciaba desde Moldes el inicio de las operaciones del ducto gasífero que llega hasta La Viña, con un trazado paralelo a la ruta nacional 68.
En ese acto, que movió denuncias por violación de la veda electoral, a diez días de las primarias nacionales de 2013, la mandataria daba por concretado el acceso de "10 mil familias" del Valle de Lerma sur al servicio de gas natural.
La mandataria entonces erró largamente, ya que Moldes tenía cerca de 4.000 habitantes y La Viña, otros 3.300. Entre los datos censales de 2010 y las supuestas 10.000 familias beneficiadas con el gas existía una abismal diferencia que no fue advertida.
En los mensajes inaugurales del 1 de agosto de 2013 también se afirmó que el gasoducto beneficiaría a 176 productores tabacaleros en su zona de influencia.
Hoy ese gasoducto tiene conectados solo dos clientes. Se trata del centro de estufado que empezó a recibir gas en Moldes en noviembre de 2014 y de las estufas comunitarias de La Viña, que fueron conectadas al servicio recién en noviembre de 2015.
Sin aprobaciones
En agosto de 2013 el gasoducto no estaba ni siquiera en condiciones de ser habilitado, pero, en plena campaña política, se apuró una inauguración para la tribuna, sin las aprobaciones que la normativa de seguridad vigente confía al Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS).
Este grave incumplimiento fue confirmado a El Tribuno por fuentes del organismo.
Prueba de ello es también el acto que encabezó el gobernador Urtubey, el sábado 14 de marzo de 2015, en el centro de estufado comunitario de Moldes. Esa ceremonia marcó la habilitación oficial de los usos productivos del gas en la citada localidad.
El gasoducto del Valle de Lerma sur es, en realidad, una extensión del tendido que inauguró el sector tabacalero en 1999 en el Valle de Lerma central. De esa línea se desprendieron las redes domiciliarias de Rosario de Lerma, Cerrillos, Campo Quijano y localidades vecinas.
Recientemente, con un aporte de la Provincia de $2,8 millones, se construyó red domiciliaria de El Carril, con 800 nuevas conexiones.
"Nos instalaron gabinetes vacíos y nunca volvieron"
Vecinos de Coronel Moldes aún esperan la instalación de gas natural en sus casas. A fin de mes vence el plazo de un año para la construcción de las redes domiciliarias de gas de Coronel Moldes, pero de esa obra no hay señales, salvo por los gabinetes que se instalaron en algunas viviendas para acallar cuestionamientos en la última campaña electoral.
El 27 de marzo de 2015, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca aprobó una partida de $8.269.812 del Fondo Especial del Tabaco (FET) para la ejecución de los tendidos de gas natural en distintas barrios de Moldes.
En la resolución 88, con la que se autorizó el financiamiento de las redes domiciliarias de la localidad, el organismo nacional remarcó que, en caso de no concretarse los trabajos en el plazo de un año, los fondos serían reasignados a otros proyectos.
Las obras pendientes fueron gestionadas por el Gobierno provincial, a través de la administración del FET y dentro del mismo programa con el que se financió el gasoducto que se extiende desde finca Las Moras (Chicoana) hasta La Viña.
"Nos instalaron los gabinetes para el gas en setiembre del año pasado, pero después nunca más tuvimos novedades sobre el servicio", recordó Sara Wayar, una vecina de la avenida San Martín.
En los negocios de Moldes las garrafas de 10 kilos cuestan $125. La social sale $95, pero su distribución quedó afectada a comienzos de año por el paro municipal que se resolvió, a principios de este mes, con la intervención de la comuna que hoy está a cargo de Rodolfo Antonelli.
"En mi casa somos siete personas que consumimos dos garrafas y media por mes", contó Jorge Bernel, quien vive con sus padres y hermanos en una de las casas de la avenida San Martín. En esa arteria, que concuerda con la línea de la ruta nacional 68, los medidores están de adorno.
En La Viña, nada
Según los anuncios oficiales, el gasoducto que se financió con el FET también llevaría el servicio a hogares de La Viña.
Sin embargo, en esa localidad, distante a 83 kilómetros al sur de la capital salteña, sus 3.000 habitantes ni siquiera tienen gabinetes de medidores vacíos para ilusionarse.
Allí, el gas natural solo es aprovechado por el centro de estufado comunitario que emplazó la Cámara del Tabaco en las afueras del pueblo.
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"Hoy estamos inaugurando este importante gasoducto, con una inversión de más de $35 millones, que permite que más de 10.000 familias puedan tener gas y que los productores puedan mejorar la calidad de su producto y su competitividad". Esto anunciaba la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner el 1 de agosto de 2013, desde Coronel Moldes, para todo el país, a través de la TV Pública.
A casi tres años de aquel concurrido acto en el que acompañaron a la mandataria su ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, el gobernador Juan Manuel Urtubey y un importante marco de dirigentes y militantes del Frente para la Victoria, esas 10.000 familias de Coronel Moldes y La Viña todavía cocinan y se calefaccionan con garrafas, leña y carbón.
El gasoducto del Valle de Lerma sur, en realidad, costó más de $38 millones, aunque originariamente la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación había asignado para el proyecto $25 millones en noviembre de 2012.
Las obras, financiadas con recursos del Fondo Especial del Tabaco (FET), fueron adjudicadas a Mega SRL, una constructora que en los últimos años se posicionó entre las principales contratistas de la Secretaría de Obras Públicas de la Provincia y la Coordinación del Fondo de Reparación Histórica del Norte.
A casi tres años de aquel concurrido acto en el que acompañaron a la mandataria su ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, el gobernador Juan Manuel Urtubey y un importante marco de dirigentes y militantes del Frente para la Victoria, esas 10.000 familias de Coronel Moldes y La Viña todavía cocinan y se calefaccionan con garrafas, leña y carbón.
El gasoducto del Valle de Lerma sur, en realidad, costó más de $38 millones, aunque originariamente la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación había asignado para el proyecto $25 millones en noviembre de 2012.
Las obras, financiadas con recursos del Fondo Especial del Tabaco (FET), fueron adjudicadas a Mega SRL, una constructora que en los últimos años se posicionó entre las principales contratistas de la Secretaría de Obras Públicas de la Provincia y la Coordinación del Fondo de Reparación Histórica del Norte.
El gasoducto de 54 kilómetros, se inició en agosto de 2011 en Las Moras, una extensa finca de Chicoana que, curiosamente, tiene al dueño de la empresa Mega, Carlos Berruezo, como titular desde el 26 de junio de 2013.
Pocas semanas después de esa fecha la expresidenta anunciaba desde Moldes el inicio de las operaciones del ducto gasífero que llega hasta La Viña, con un trazado paralelo a la ruta nacional 68.
En ese acto, que movió denuncias por violación de la veda electoral, a diez días de las primarias nacionales de 2013, la mandataria daba por concretado el acceso de "10 mil familias" del Valle de Lerma sur al servicio de gas natural.
La mandataria entonces erró largamente, ya que Moldes tenía cerca de 4.000 habitantes y La Viña, otros 3.300. Entre los datos censales de 2010 y las supuestas 10.000 familias beneficiadas con el gas existía una abismal diferencia que no fue advertida.
En los mensajes inaugurales del 1 de agosto de 2013 también se afirmó que el gasoducto beneficiaría a 176 productores tabacaleros en su zona de influencia.
Hoy ese gasoducto tiene conectados solo dos clientes. Se trata del centro de estufado que empezó a recibir gas en Moldes en noviembre de 2014 y de las estufas comunitarias de La Viña, que fueron conectadas al servicio recién en noviembre de 2015.
Sin aprobaciones
En agosto de 2013 el gasoducto no estaba ni siquiera en condiciones de ser habilitado, pero, en plena campaña política, se apuró una inauguración para la tribuna, sin las aprobaciones que la normativa de seguridad vigente confía al Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS).
Este grave incumplimiento fue confirmado a El Tribuno por fuentes del organismo.
Prueba de ello es también el acto que encabezó el gobernador Urtubey, el sábado 14 de marzo de 2015, en el centro de estufado comunitario de Moldes. Esa ceremonia marcó la habilitación oficial de los usos productivos del gas en la citada localidad.
El gasoducto del Valle de Lerma sur es, en realidad, una extensión del tendido que inauguró el sector tabacalero en 1999 en el Valle de Lerma central. De esa línea se desprendieron las redes domiciliarias de Rosario de Lerma, Cerrillos, Campo Quijano y localidades vecinas.
Recientemente, con un aporte de la Provincia de $2,8 millones, se construyó red domiciliaria de El Carril, con 800 nuevas conexiones.
"Nos instalaron gabinetes vacíos y nunca volvieron"
Vecinos de Coronel Moldes aún esperan la instalación de gas natural en sus casas. A fin de mes vence el plazo de un año para la construcción de las redes domiciliarias de gas de Coronel Moldes, pero de esa obra no hay señales, salvo por los gabinetes que se instalaron en algunas viviendas para acallar cuestionamientos en la última campaña electoral.
El 27 de marzo de 2015, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca aprobó una partida de $8.269.812 del Fondo Especial del Tabaco (FET) para la ejecución de los tendidos de gas natural en distintas barrios de Moldes.
En la resolución 88, con la que se autorizó el financiamiento de las redes domiciliarias de la localidad, el organismo nacional remarcó que, en caso de no concretarse los trabajos en el plazo de un año, los fondos serían reasignados a otros proyectos.
Las obras pendientes fueron gestionadas por el Gobierno provincial, a través de la administración del FET y dentro del mismo programa con el que se financió el gasoducto que se extiende desde finca Las Moras (Chicoana) hasta La Viña.
"Nos instalaron los gabinetes para el gas en setiembre del año pasado, pero después nunca más tuvimos novedades sobre el servicio", recordó Sara Wayar, una vecina de la avenida San Martín.
En los negocios de Moldes las garrafas de 10 kilos cuestan $125. La social sale $95, pero su distribución quedó afectada a comienzos de año por el paro municipal que se resolvió, a principios de este mes, con la intervención de la comuna que hoy está a cargo de Rodolfo Antonelli.
"En mi casa somos siete personas que consumimos dos garrafas y media por mes", contó Jorge Bernel, quien vive con sus padres y hermanos en una de las casas de la avenida San Martín. En esa arteria, que concuerda con la línea de la ruta nacional 68, los medidores están de adorno.
En La Viña, nada
Según los anuncios oficiales, el gasoducto que se financió con el FET también llevaría el servicio a hogares de La Viña.
Sin embargo, en esa localidad, distante a 83 kilómetros al sur de la capital salteña, sus 3.000 habitantes ni siquiera tienen gabinetes de medidores vacíos para ilusionarse.
Allí, el gas natural solo es aprovechado por el centro de estufado comunitario que emplazó la Cámara del Tabaco en las afueras del pueblo.