Luego del plenario en el Concejo, El Tribuno consultó al presidente de Aguas del Norte, Lucio Paz Posse, sobre temas que preocupan a la población, como la seguridad del agua que se consume.
Un informe que publicó El Tribuno hace dos semanas reveló que el agua en Salta no es segura, a pesar de ser potable. ¿Cómo garantizarán que el agua sea segura en la ciudad y en la provincia?
Son distintos conceptos. El agua es potable, de acuerdo con la normativa que nosotros tenemos. La empresa cumple con los parámetros de potabilización, con los químicos correspondientes, haciendo todos los protocolos que se establecen para potabilizar el agua.
Hay nuevos conceptos que tiene que ver con el agua segura. Yo creo que ahí todos los ciudadanos tienen que aportar su granito de arena. Nosotros garantizamos la fuente. Ahora, el ciudadano también tiene que constatar su cisterna, hacerle una limpieza periódica. Esto también hace a la seguridad del abastecimiento en cada uno de los domicilios y en los edificios públicos.
Estamos trabajando en esa dirección y también vamos a llevar adelante una campaña de cuidado del agua, pero creo que en el tema de agua segura tenemos que mejorar todos como sociedad, y cada uno desde su lugar hacer todo lo que tiene que llevar adelante para garantizar el agua segura.
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Luego del plenario en el Concejo, El Tribuno consultó al presidente de Aguas del Norte, Lucio Paz Posse, sobre temas que preocupan a la población, como la seguridad del agua que se consume.
Un informe que publicó El Tribuno hace dos semanas reveló que el agua en Salta no es segura, a pesar de ser potable. ¿Cómo garantizarán que el agua sea segura en la ciudad y en la provincia?
Son distintos conceptos. El agua es potable, de acuerdo con la normativa que nosotros tenemos. La empresa cumple con los parámetros de potabilización, con los químicos correspondientes, haciendo todos los protocolos que se establecen para potabilizar el agua.
Hay nuevos conceptos que tiene que ver con el agua segura. Yo creo que ahí todos los ciudadanos tienen que aportar su granito de arena. Nosotros garantizamos la fuente. Ahora, el ciudadano también tiene que constatar su cisterna, hacerle una limpieza periódica. Esto también hace a la seguridad del abastecimiento en cada uno de los domicilios y en los edificios públicos.
Estamos trabajando en esa dirección y también vamos a llevar adelante una campaña de cuidado del agua, pero creo que en el tema de agua segura tenemos que mejorar todos como sociedad, y cada uno desde su lugar hacer todo lo que tiene que llevar adelante para garantizar el agua segura.
Cuando la Provincia tuvo el Fondo de Reparación Histórica para obras de agua y saneamiento en el norte, algunas no se terminaron. ¿Cómo garantizan que los fondos que se consigan para obras nuevas se usen bien?
Las obras se van a terminar y se está trabajando. Lo que pasó es que en algunos lugares había inconvenientes, como en Orán, con el lugar de emplazamiento de la planta de tratamiento de líquidos cloacales. Después hubo una demora por el impacto ambiental. Ya se fueron subsanando y nosotros esperamos que hasta mediados del año que viene estén concluidas todas esas obras.
¿Cuánto dinero representan los subsidios a las iglesias?
La Provincia, a través del Ente Regulador, establece la prestación de un servicio a personas que no son usuarias. Nosotros brindamos el servicio a través de camiones cisterna o, en el caso de los clubes que solicitan el subsidio, se hace cargo el Estado provincial. Hablamos de 4 millones y medio de pesos que van para los sistemas de reparto de agua con camión -también para comunidades aisladas- y lo que tiene que ver con la indigencia y con clubes e iglesias y demás entidades sociales.