¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

18°
16 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Acusa a su familia de malos tratos

Denunció que lo quieren echar del hogar porque padece esquizofrenia.
Jueves, 24 de enero de 2019 01:40

Juan Alberto Soria, un hombre que tiene 50 años y padece ezquizofrenia, relató el drama que viene sufriendo en el seno de su familia. Contó que desde la muerte de su padre, hace dos años, es víctima de un permanente hostigamiento por parte de su madre y hermanos, a quienes acusa de que lo quieren internar por la fuerza en el hospital de Salud Mental.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Juan Alberto Soria, un hombre que tiene 50 años y padece ezquizofrenia, relató el drama que viene sufriendo en el seno de su familia. Contó que desde la muerte de su padre, hace dos años, es víctima de un permanente hostigamiento por parte de su madre y hermanos, a quienes acusa de que lo quieren internar por la fuerza en el hospital de Salud Mental.

Sin embargo, el hombre exhibió un certificado del médico que lo trata en el que consigna que fue dado de alta y está estable de su patología. En el mismo escrito, el Dr. Ezequiel Bollati y la psicóloga Emilia López sugieren que la Universidad Católica de Salta le renueve la beca para que pueda seguir cursando la Licenciatura en Trabajo Social. "Consideramos de importancia para su reinserción social que continúe con sus estudios", señalan los profesionales. También dispusieron que el IPSS designe a un acompañante terapéutico por cuatro horas diarias para que controle su medicación.

"Lo que quiere mi familia es echarme de la casa porque me consideran un estorbo y por eso me cierran las puertas y ni al baño me dejan entrar", expresó desesperado. "Tengo que hacer mis necesidades en un balde y esperar que todos se duerman para poder asearme", relató Soria, al graficar el drama que está sufriendo.

Dijo que vive en el fondo de la propiedad ubicada en el pasaje 13, casa 464 de Barrio Santa I, que se prepara la comida en un calentador y que otras veces son los vecinos los que le acercan un plato de comida. "El año pasado inventaron que quise agredir a mi madre y por eso me internaron en el hospital Ragone, pero luego se probó que eran mentira y los médicos me dieron el alta", contó.

Soria sostuvo: "Por todas esas mentiras me perjudicaron en los estudios y en mi trabajo". Explicó que recibe un pensión de 6 mil pesos y que es matriculado en arreglos de aire acondicionado. "Yo trabajo, no les pido nada, quiero seguir estudiando, pero lamentablemente mi familia me está haciendo la vida imposible", dijo, y mostró las denuncias presentadas en la policía y en todas ellas pide que la Justicia tome cartas en el asunto. "Quiero que escuchen, que paren el ataque que sufro", clamó.

 

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD