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"Caminamos hora y media para llegar hasta los cuerpos"

Uno de los testigos contó el operativo tras el incendio. Ayer declararon cuatro personas en el juicio contra Víctor Ola Castro, Roberto Durnelli y Víctor Dagún.
Martes, 22 de octubre de 2019 02:30

Aníbal Rodríguez fue una de las pocas personas que vio los cuerpos de los brigadistas Mauricio Valdez, Víctor Ferreyra, Martín Albarracín y Matías Vilte el día después de que fallecieran calcinados en el cerro El Acheral, el 27 de octubre de 2014.

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Aníbal Rodríguez fue una de las pocas personas que vio los cuerpos de los brigadistas Mauricio Valdez, Víctor Ferreyra, Martín Albarracín y Matías Vilte el día después de que fallecieran calcinados en el cerro El Acheral, el 27 de octubre de 2014.

Rodríguez fue parte del personal de bomberos que participó en el traslado de los cadáveres y tuvo a su cargo el informe que documentó todo lo encontrado en el lugar. Su testimonio fue uno de los cuatro que se escucharon en la quinta audiencia por el juicio que se sigue contra Víctor Jesús de Ola Castro, Roberto Durnelli y Víctor César Dagún, acusados del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público tras la muerte de los brigadistas en Guachipas.

El testigo declaró que el equipo llegó hasta el lugar acompañado de algunos baquianos, quienes les señalaron dónde se encontraban los brigadistas.

"Llegamos en camioneta y después tuvimos que caminar aproximadamente una hora y media para llegar al lugar donde se encontraban los cuerpos de los cuatro brigadistas quemados", comentó Rodríguez sobre la dificultad que tuvo para acceder sitio donde ocurrió el incidente.

El testigo recordó que los cuerpos fueron trasladados por el personal de la guardia de incendio hacia la zona donde estaban los vehículos y afirmó que en su informe no pudo precisar cuál fue el punto de origen del incendio porque era una zona bastante compleja y grande. Era imposible hacer a pie el desplazamiento por toda la zona.

Rodríguez no recordó si había personal policial o baquianos cuando llegaron al lugar. Comentó que tres de los cuatro brigadistas estaban juntos y cercanos a una pendiente. "Se podía entender que iban a una misma dirección", agregó. El cuarto cuerpo estaba más alejado, aunque no precisó a que distancia se encontraba de sus compañeros.

"Los cuerpos tenían signos de que habían estado expuestos al calor", declaró el testigo cuando fue indagado por la fiscal Mónica Poma sobre en qué condiciones estaban. Las audiencias están a cargo del juez de Garantías 4, Diego Rodríguez Pipino, en el Salón de Grandes Juicios de la Ciudad Judicial.

Otros testimonios

Jorgelina Cardozo fue la primera en prestar testimonio. Ella se desempeña como policía y fue una de las personas que intervino en el procedimiento que se llevó a cabo en el lugar donde fueron encontrados los cuerpos de los brigadistas. Afirmó que era muy poco lo que se podía apreciar de las prendas de vestir, ya que estaba todo calcinado. Refirió que algunas de las mochilas estaban puestas en los cuerpos, pero también incineradas. Recordó que encontró uno de los celulares de las víctimas, que no estaba tan dañado.

Complican a Durnelli

Luego fue el turno de Héctor Marcelo Gallardo, quien se desempeñaba como coordinador general del NOA del Plan Nacional de Manejo de Fuego. Dijo que el año anterior al hecho supervisó la ropa y los elementos de protección destinados a Salta para los brigadistas. A preguntas de las partes, refirió que el responsable de la brigada en Salta era Dagún.

Finalmente declaró Mario Darío Núñez, quien a la fecha del hecho trabajaba como personal contratado de la Oficina de Recuperación de Espacios Públicos. Él llevaba una mochila de agua y dijo que nunca había realizado un curso para apagar incendios, que la mochila de agua aprendió a usarla mirando, y que hacía trabajos de desmalezamiento. Agregó que quien le ordenó que vaya a apagar incendios pese a no haber recibido capacitación previa fue su jefe, Roberto Durnelli.

Dudas

Omar Valdez, padre del brigadista Mauricio Valdez, estaba presente en la sala junto a la esposa de su hijo y la madre de Matías Vilte.

"No estoy muy tranquilo pero estamos sobrellevando la carga. Hay muchos testimonios que se falsearon, tanto compañeros que eran de mi hijo, y manifiestan tener la ropa que corresponde, para mi están falseando. No tenían las máscaras para poder respirar. Espero que se tome en cuenta todo esto y se revea cada declaración", expresó.

Valdez se refirió a la tarea que está realizando el fiscal y expresó que lo "tiene un poco intrigado" porque todavía no cambia la carátula a homicidio simple, como están pidiendo los familiares de los brigadistas.

 

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