Suben uno de los cerros más alto de los Valles Calchaquíes, para bajar en peregrinación a la Virgen del Valle. Se trata de un grupo de devotos, que haciendo lugar a una tradición de más de dos décadas, ascendió días atrás a la cima de El Zorrito, ubicada a 3.270 msnm, donde se encuentra la sagrada imagen en una pequeña grutita de piedra. Esta advocación es patrona del paraje Las Conchas, del municipio de Cafayate. Allí, el 8 de diciembre se celebra la fiesta central en su honor.
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Suben uno de los cerros más alto de los Valles Calchaquíes, para bajar en peregrinación a la Virgen del Valle. Se trata de un grupo de devotos, que haciendo lugar a una tradición de más de dos décadas, ascendió días atrás a la cima de El Zorrito, ubicada a 3.270 msnm, donde se encuentra la sagrada imagen en una pequeña grutita de piedra. Esta advocación es patrona del paraje Las Conchas, del municipio de Cafayate. Allí, el 8 de diciembre se celebra la fiesta central en su honor.
La travesía
Para llegar a la gruta, hay que transitar en vehículo unos 23 kilómetros desde la ciudad cabecera del departamento, hasta el paraje Las Conchas y desde allí otros 5 kilómetros, aproximadamente, hasta el paraje Corralito. Desde este último pueblo comienza la caminata, primero hacia el pie del cerro, para luego trepar hasta la punta.
Es una travesía que puede durar entre 4 y 6 horas a pie, depende el estado físico de cada persona y las condiciones climáticas. “Este año participaron más de 50 personas, movilizadas fundamentalmente por la fe. Es una actividad religiosa y cultural que se repite todos los fines de noviembre”, contó José Ayusa, comunicador local.
Luego recordó, que “hace unos 22 años pusieron la imagen de la Virgen en la cima de El Zorrito. Desde ese punto, puede divisarse gran parte de los Valles Calchaquíes, hasta Cachi. Es un espectáculo impresionante. Puede sentirse la grandeza y la belleza del paisaje”.
“Allá en lo alto”
En un principio la imagen se encontraba a la intemperie, pero -relató Ayusa- hace unos cuatro años los devotos le hicieron una gruta de piedra “allá en lo alto”. Tuvieron que trasladar hasta esas alturas bolsas de cemento, herramientas y otros materiales. Ahora, la Virgen permanece bajo resguardo.
A principios de mayo, también en peregrinación, la gente vuelve a depositar la imagen en la cima del cerro. “Tanto para bajar la Virgen, como para llevarla nuevamente a su gruta, hay que partir a las 4 o 5 de la mañana. Suele llegarse al mediodía a la cima. Allí se reza a la Madre, se descansa y se come liviano para retornar a Corralito, donde nos espera la familia Mamaní. Ya es una tradición", detalló el cafayateño. La bajada es más rápida, puede durar unas dos horas y media.
Cada año más y más gente quiere sumarse a la experiencia. La festividad en honor a la Virgen será el 8 de diciembre en la capilla de Las Conchas, un poblado en el que habitan unas 200 personas. Las actividades serán encabezadas por el padre Pablo Hernando Moreno.
En el pueblo de Las Conchas, precisamente, se encuentra una institución educativa cuyo nombre hace honor a la advocación: Escuela Rural Virgen del Valle.