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El noble oficio de informar

Viernes, 09 de junio de 2023 00:00

El Día del Periodista deja siempre el sabor dulce de las innumerables muestras de simpatía que nos hacen llegar los lectores. Representa una valoración de nuestro trabajo y, sobre todos, de la función que nos toca cumplir en la sociedad. Muchas veces se habla del "noble oficio" del periodismo, y es cierto. El periodismo ejercido con responsabilidad profesional es una actividad que contribuye sustancialmente al desarrollo humano y es, además, esencial para la democracia. Pero todos los oficios humanos son nobles cuando son realizados con idoneidad y con respeto por el resto de la sociedad.

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El Día del Periodista deja siempre el sabor dulce de las innumerables muestras de simpatía que nos hacen llegar los lectores. Representa una valoración de nuestro trabajo y, sobre todos, de la función que nos toca cumplir en la sociedad. Muchas veces se habla del "noble oficio" del periodismo, y es cierto. El periodismo ejercido con responsabilidad profesional es una actividad que contribuye sustancialmente al desarrollo humano y es, además, esencial para la democracia. Pero todos los oficios humanos son nobles cuando son realizados con idoneidad y con respeto por el resto de la sociedad.

En esta época, la comunicación se ha multiplicado en una creciente variedad de plataformas. En todas ellas se puede ejercer el periodismo, o no. Todo depende de la actitud y la intención con se comunique. La tecnología agiganta las posibilidades de contacto entre seres humanos, pero también permite la intervención de robots dedicados a construir realidades virtuales.

El periodismo no es una comunicación cualquiera. Como la historia, que no puede ser un mero relato. En su Teoría de la acción comunicativa, el filósofo alemán Jürgen Habermas propone cuatro supuestos como la base de la racionalidad del habla humana: inteligibilidad, verdad, rectitud y veracidad.

Esos principios, aplicados al periodismo, permiten poner orden al caos de informaciones y datos que produce la sociedad. Son relatos que pueden ser veraces, o no, pero que circulan por las redes y, eventualmente, pueden estar fogoneados por intereses políticos, económicos, comerciales o simplemente, creados por ingenuos o mitómanos.

Esto lleva al sentido profundo del concepto de "edición". No existe la posibilidad de hacer un diario o un informativo sin la inteligibilidad, la racionalidad, que brinda la edición.

Cuando se habla de "periodismo militante" solo importa el criterio de inteligibilidad; la verdad, la rectitud y la veracidad se subordinan al interés del líder o del partido.

Por eso es tan importante que la información esté "chequeada", es decir, verificada en distintas fuentes, que se la interprete honestamente y recién en ese momento, se la publique. Es claro que, de ese modo, el periodismo profesional e independiente se transforma en una presencia insoportable para déspotas y corruptos. No es casual que las autocracias busquen someter a los Parlamentos, maniatar a la Justicia, cooptar los organismos de control del poder y perseguir a los periodistas. ¿Qué otra cosa es la teoría del lawfare que el contraataque de funcionarios investigados? Por eso tratan de degradar a los medios y al Poder Judicial, e invocan poderes etéreos que conspirarían contra ellos.

En 2022 fueron asesinados 42 periodistas en América, 20 de ellos, en México. El crimen organizado tampoco tolera la libertad de prensa ni al periodismo de investigación.

Ningún sistema de gobierno está libre de corruptelas, traiciones y de funcionarios ineficientes. Ninguna actividad humana lo está. Pero la democracia, con libertad de prensa e independencia de los poderes del Estado, es y seguirá siendo la que construye sociedades dignas.

Un comunicador corrupto, irresponsable o mitómano deja de ser periodista, aunque trabaje en un medio profesional.

La celebración del Día del Periodista coincide con la creación del primer diario fundado el 7 de junio de 1810, apenas producida la Revolución de Mayo. Su fundador, Mariano Moreno, escribió en la primera edición:

"El pueblo no debe contentarse con que sus jefes obren bien, debe aspirar a que nunca puedan obrar mal. Para logro de tan justos deseos ha resuelto la Junta que salga a la luz un nuevo periódico semanal con el título de Gazeta de Buenos Ayres". Palabras de un prócer de la libertad. Moreno sabía que, sin buena información, el pueblo no puede decidir libremente. Y, así, la democracia se vuelve una quimera.

 

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