PUBLICIDAD

Su sesión ha expirado

Iniciar sesión
15°
23 de Noviembre,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Las obras estratégicas: Un fuerte reclamo de los gobernadores

Se impone una reconstrucción del sistema federal.
Domingo, 23 de noviembre de 2025 00:52
Diego Santilli.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

El punto crucial son las obras públicas. Y no solo por el empleo de generan. Desde 2023, más de 3.500 obras públicas quedaron paralizadas en Argentina, afectando rutas, hospitales, viviendas y proyectos estratégicos. El impacto es especialmente grave en el Norte Grande, donde la falta de infraestructura profundiza las desigualdades históricas con el centro del país.

El elixir del ajuste, teóricamente, y según Javier Milei, punto de partida para el desarrollo, no debería considerar la construcción de obras de infraestructura como un "gasto público": son piezas estratégicas para la modernización urbana y para contar con un sistema de transporte y logística acorde con las necesidades de una industrialización competitiva en los mercados del exterior.

De esos temas, y no sobre las teorías de Ludwig von Mises, John Maynard Keynes, Antonio Gramsci, es que los gobernadores y el poder central deben discutir. Porque la gente sabe bien lo que le interesa, que no es la ideología encubridora (de la que hablaba Marx) ni mucho menos, el de negociaciones inconfesables.

Un nuevo federalismo

Por una parte, es urgente el afianzamiento de gobernadores, intendentes y legisladores como responsables desarrollo provincial. Pero esa responsabilidad exige, además, la materialización de estrategias regionales que, en el Norte Grande, podrían multiplicar la actividad, tecnificarla y construir una proyección exterior estable y dinámica. Y eso no va a ocurrir si la columna vertebral de los ingresos de las provincias sigue siendo la coparticipación.

El federalismo fiscal no es una utopía. Si se avanza en un esquema donde cada provincia cobre el IVA y el Impuesto a las Ganancias, y coparticipe a la Nación, se fortalecería la autonomía financiera. Claramente, para aumentar la producción primaria y con valor agregado. Por supuesto, con los desequilibrios actuales, va a pasar un tiempo en el que deberá existir un sistema de compensaciones estables.

El "nuevo federalismo" no será un decreto ni una ley única: será el resultado de negociaciones políticas y fiscales entre Nación y provincias. El Norte Grande, con su reclamo de obras y recursos, se convierte en protagonista de este proceso. La pregunta de fondo es si Argentina puede construir un federalismo que no sea solo administrativo, sino también social y territorial, capaz de reducir las desigualdades históricas.

 

Temas de la nota

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD