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Y la fiesta fue completa para el ciclón, que con la alegría a cuestas por haberse aprobado la ley de restitución histórica, que le permitirá retornar a Boedo enhebró un triunfo clave ante Atlético de Rafaela, un rival directo en la lucha por el promedio, que lo dejó afuera, al menos una jornada más, de la zona de descenso.
En el arranque, San Lorenzo manejó las acciones, aunque sin profundidad. Al promediar la mitad de ese período llegó la apertura del marcador. Fabián Bordagaray recibió una buena asistencia de Alan Ruiz, penetró al área por izquierda, remató al arco y Stracqualursi capitalizó el rebote de Guillermo Sara con todo el arco a su disposición.
El ciclón, sin brillar, justificaba la ventaja por su constante presión sobre la salida de Rafaela, la que mermó en el inicio del segundo tiempo cuando la visita transitó su mejor momento en el partido. En ese lapso, el juego se desarrolló cerca del área local pero sin demasiado riesgo para Pablo Migliore, que igualmente no brindó demasiada seguridad.
Superado el acoso rafaelino, los de Pizzi retomaron el control del partido pero no supieron definirlo pese a la disposición de la pelota y los espacios para el contraataque.
Denis Stracqualursi tuvo mucha participación como pivote en la construcción de la jugada pero no pudo aumentar su cuenta personal.
Así, luego de malograr varias acciones, el equipo de Pizzi se aferró a la diferencia que ya contaba y el partido se consumió con el riesgo de un acierto ofensivo de Rafaela.